
En las dos últimas semanas, Zynga se ha hundido cerca del 45% en bolsa. Publicó unos beneficios inferiores a lo esperado y rebajó sus previsiones. Y sufrió un pleito de uno de los gigantes de la industria del vídeojuego. Los golpes se suceden para una empresa que hasta no hace mucho era la niña bonita para convertirse en la nueva sensación del sector. Y puede que haya más malas noticias en camino para Zynga.
El 16 de agosto expira el período de lock-up para 150 millones de opciones sobre acciones de sus empleados, y aunque el valor está lejos de donde los trabajadores esperaban que estaría, algo de dinero es mejor que nada. Zynga utilizó las stock options como su gran arma para atraer talento antes de su OPV, ya que los desarrolladores de la industria de las consolas no se veían atraídos por su fe en el futuro de la empresa, sino por la tentación de una riqueza repentina cuando la empresa saliera a bolsa.
Entonces, la explosión de Zynga en bolsa parecía garantizada. Pero las cosas cambian. Y los empleados que quieren un cambio en su carrera pueden estar esperando a que expire ese lock-up para marcharse de la empresa.
Será la cuarta expiración de un lock-up desde la OPV de la empresa, lo que está incrementando drásticamente su free-float.
Cuando Zynga salió a bolsa, sólo tenía 100 millones de acciones en circulación. Entre una ampliación de capital y la expiración de estos períodos en los que los empleados no pueden vender, esta cifra ha subido hasta 600 millones. Y el vencimiento de la semana próxima llevará la liquidez del valor hasta casi 800 millones.
Lío con EA
Mientras tanto, el pleito de la semana pasada por violación del copyright interpuesto por Electronic Arts es el último en una escalada de problemas legales de la empresa. A principios de semana, una firma de bogados de California acusó a Zynga de no desvelar datos críticos y pretende convertir la demanda en colectiva (class action).
La disputa con EA es lo que más preocupa ahora mismo a los inversores y los analistas. Los competidores se han quejado a menudo de las semejanzas de los juegos de Zynga con los suyos, pero ninguno tenía recursos para montar un pleito en condiciones. EA tiene los recursos para llevar el caso hasta el final. Y eso es algo que puede pesar sobre el valor de Zynga durante mucho tiempo.
Para terminar de complicar las cosas, tenemos la decisión de Zynga de cambiar a su cúpula y quitar las responsabilidades de supervisión de los juegos a su director de operaciones John Schappert, un veterano de la industria que ha tenido cargos ejecutivos en EA y Microsoft. Hay quien piensa que esto indica que habrá más decepciones de resultados en los próximos trimestres.
Los analistas creen que lo que hay que vigilar es si el talento de la empresa fichado desde las empresas de vídeojuegos tradicionales se queda en ella y cómo se intenta convertir en una potencia en el mercado móvil.
También hay que estar atentos a la construcción del portal de Zynga, que reducirá su dependencia de Facebook.
No obstante, se trata de acontecimientos a largo plazo, y los inversores están esperando un catalizador a corto. Y aunque no todo el mundo esta convencido, algunos inversores consideran estas dudas como una oportunidad para que los inversores pacientes ganen dinero.
"Mirando al futuro, tiene una oportunidad de hacerlo bien", según Mike Hickey de National Alliance Capital Markets. "De momento, el sentimiento de mercado es claramente negativo porque estamos en el punto de inflexión de un nuevo ciclo, así que creo que es un gran momento para encontrar valor", concluye.