
El Bundesbank, banco central alemán, es la voz más fuerte que se opone a la compra de bonos de deuda soberana en la Eurozona, y entre las razones que da siempre es que crea "falsos incentivos".
El banco mantiene que no ha habido cambios en sus posiciones, sin embargo, su postura no siempre fue así, como recuerda hoy Peter Bofinger, profesor en la Universidad de Wurzburgo, miembro del Consejo Alemán de Expertos Económicos.
En declaraciones al periódico austriaco Kurier, Bofinger asegura que el banco "compró bonos alemanes a gran escala en los años 170 para reducir los tipos de interés a largo plazo".
La agencia Bloomberg ha intentado ir más allá. Y aunque los archivos disponibles online del Bundesbank no van tan atrás, sí que ha encontrado un informe de Deutsche Bank de 1975 en el que se recoge que el banco central compró bonos por valor de 7.700 millones de marcos alemanes, equivalente a unos 3.900 millones de euros. La razón era prevenir "una amenaza e indeseable subida en los tipos de interés efectivos".
Lo curioso es que esa época también fue conocida como la crisis más grave desde la Gran Depresión, situación que se ha repetido tras el estallido de la crisis en la que actualmente está inmersa la Eurozona. Entonces, la estaflación (subida de la inflación sin crecimiento económico), estaba en su pico.
Hay que recordar que la subida de precios es el gran temor de Alemania, y el principal mandato del Banco Central Europeo (BCE). Pero en 1975, cuando el Bundesbank se embarcó en la compra de bonos, la inflación era del 6%, mientras el PIB se contrajo un 3,4%.
"¿Cuál era la mayor amenaza económica para el Bundesbank aquel año?", se pregunta la agencia, que lo compara con la situación actual: IPC en el 2,4% en la Eurozona y en el 2% en Alemania, mientras Italia y España están en recesión y manteniendo el acceso al mercado a duras penas y con costes elevados. "¿Cuál es el mayor peligro ahora?", añade.