El euribor a 12 meses, la referencia para la mayoría de las hipotecas a tipo variable en España, se atrevió por fin a situarse bajo el 2%, algo que no pasaba desde marzo. Lo venía buscando en las dos últimas semanas, sobre todo después de que el Banco Central Europeo (BCE) redujera los tipos de interés del 1,25 al 1% el 8 de diciembre, pero no lo consiguió hasta ayer.
El índice descendió del 2 al 1,997%, un retroceso que sirvió además para que la media mensual, la que se tiene en cuenta paras las revisiones hipotecarias, cayera al 2,016%. Con seis sesiones por delante para acabar diciembre, ese promedio es ya el más bajo desde marzo de este año y aún tiene margen para acercarse más al 2%.
Estos niveles se traducirán en unas cuotas hipotecarias más bajas en las revisiones semestrales, puesto que en junio el euribor se situó en el 2,14%. Para una hipoteca de 150.000 euros a 25 años, esa diferencia podría significar un abaratamiento mensual de unos 10 euros. En cambio, las actualizaciones anuales aún registrarán incrementos, ya que el promedio de diciembre de 2010 fue del 1,52%. Para una hipoteca de esas mismas características, el aumento interanual del euribor encarecerá las cuotas 35 euros al mes. Para que las revisiones con carácter anual registren descensos habrá que esperar a marzo o abril.
Demasiado lento
De este modo, el euribor sigue adelante con su operación retorno, después de que las subidas de los intereses realizadas por el BCE en abril y julio de 2011 le impulsaran hasta el 2,201% el pasado 8 de julio. Desde entonces, ha ido moderándose a la espera de que la institución monetaria reculara. Este viraje acabó produciéndose en noviembre, inmediatamente después de que Mario Draghi relevara a Jean-Claude Trichet en la presidencia del BCE.
Eso sí, aunque el nuevo presidente ya ha recortado los tipos dos veces, para llevarlos del 1,5 al 1%, la moderación del euribor ha sido proporcionalmente inferior. Este lento ritmo se ha debido a las restricciones crediticas que padece el sector bancario, unos problemás que mantienen seco el mercado interbancario, a partir del que se calcula el euribor, y que frenan la caída del índice hipotecario. En este sentido, el superpréstamo a tres años que el BCE suministró ayer a los bancos, mediante el que les inyectó 489.000 millones de euros, podría acelerar la caída del euribor.