
Han sido necesarias cinco semanas de consolidación lateral entre soportes de 10.700 y resistencias de 11.200 para que el Ibex 35 haya encontrado suficientes argumentos para poder romper el techo de este proceso consolidativo.
La ruptura de resistencias ya se intuía desde hace días e incluso a mediados de la semana pasada la presión compradora ya hizo un primer conato intradía de romper esta cota resistiva fundamental, pero al cierre no consiguió mantenerse por encima. Fue necesario esperar hasta el viernes para asistir a la final superación de los 11.200 puntos y el hecho de que esto haya sido así es algo muy positivo puesto que significa que tenemos una confirmación en cierre semanal, lo cual refuerza la ruptura.
Una vez rotos los 11.200 puntos se tiene una clara señal de continuidad de la tendencia alcista que se inició en los mínimos de febrero a la altura de los 10.000 enteros y ahora todo apunta, correcciones al margen, que el Ibex 35 se aproximará a la zona de altos anuales de los 12.000 ya que el objetivo teórico mínimo de subida, que surge de proyectar la amplitud del lateral antes descrito, se localiza en la zona de los 11.700 puntos.
Solamente si eventuales recortes profundizan en próximas fechas por debajo de los mínimos de la semana pasada, esto es, los 10.968 puntos en el caso del IBEX 35 o los 2.923 en el DJ Eurostoxx 50, se tendrían signos de deterioro que habría que analizar detenidamente puesto que no tendría mucho sentido que se perdieran estos soportes dentro de un contexto de fortaleza y de subidas adicionales como el que les hemos señalado.