
¿Conoce el dicho de que si algo puede ir a peor, irá a peor? Pues esto es lo que parece que están pensando los analistas con respecto a las inmobiliarias españolas. Si a finales del año pasado auguraban pérdidas para las principales compañías nacionales por valor de 340 millones para 2009, ahora han revisado esta cifra y han aumentado los números rojos a 986 millones.
Un pronóstico que, de cumplirse y sumarse a las pérdidas obtenidas en 2008, eliminaría todos los beneficios obtenidos en 2006 y 2007, los grandes años del boom inmobiliario.
Venta inmediata
La que se lleva el mayor recorte es Metrovacesa (MVC.MC). Los mismos analistas que allá en diciembre preveían que la inmobiliaria española cerraría el ejercicio 2009 con pérdidas de 26 millones de euros, ahora se ven obligados a elevar esta cantidad hasta los 615 millones. La recomendación, por tanto, es clara: venta inmediata, sobre todo si se tiene en cuenta que los títulos de esta compañía ya superan en 2,5 euros su precio objetivo. Y eso que Metrovacesa ya ha perdido nada menos que un 59% de su valor en bolsa en 2009.
La misma recomendación es la que soportan sus competidoras. No en vano, todas ellas, a excepción de Inmobiliaria Colonial, en la que los bancos acreedores que han tomado el capital, también han empeorado sus estimaciones de beneficios para este año. La razón, muy simple: el mercado inmobiliario aún no ha tocado suelo, según aseguran los expertos, y, por tanto, las pérdidas de las compañías que se dedican a este sector tampoco parece que lo hayan hecho.
De hecho, según el último informe del Servicio de Estudios de BBVA, los precios de la vivienda caerán de media un 7,5% en 2009 y un 10,5% en 2010. Y hay quien habla de caídas del 40-50%. Esto podría explicar por qué mientras que en diciembre el consenso auguraba un beneficio neto de 20 millones de euros para Realia (RLIA.MC), ahora sólo ve unas sombras en forma de pérdidas de 23 millones de euros.
Lo mismo sucede con Renta Corporación (REN.MC) y Reyal Urbis (REY.MC), cuya estimación de pérdidas para este año ha aumentado de los 22 a los 29 millones de euros en el caso de la primera, y de los 134 millones a los 159 para la segunda.
Colonial, contracorriente
La buena noticia es, sin embargo, que a juicio de los analistas, éste será el peor año para las inmobiliarias ya que aunque en 2010 no conseguirán abandonar las pérdidas, sí lograrán reducirlas. Al menos si no se llaman Inmobiliaria Colonial <:CAR.MC:>. La compañía presidida por Juan José Brugera es la única de la que se espera obtenga peores resultados en 2010 que en 2009.
Concretamente, el consenso calcula que cierre este año con minusvalías de 100 millones de euros, cifra que, por cierto, es 78 millones inferior a lo que se estimaba en diciembre. Para 2010, sin embargo, se acentuarán las malas noticias para la compañía, de la que se espera que pierda 124 millones.
Pero esto no es lo único que diferencia a Colonial de sus homólogas. También es una de las que menos valor pierde en bolsa. Se deja tan solo un 16% en el parqué, frente a las pérdidas del 70% de Reyal Urbis o del 20% de Afirma. La mejor, Realia, que sube un 5%.
Recuperación lejana
Ante el mal panorama que ven los expertos para los próximos años, varias casas de análisis han dejado de cubrirlas a la espera de que el sector mejore en el medio plazo. A juzgar por estos datos, que el sector inmobiliario español no goza de demasiada popularidad entre los inversores de renta variable es un hecho. Pero, ¿sucede lo mismo con este tipo de compañías cuando se atraviesan los Pirineos?
Si se observa el comportamiento de los fondos que invierten en este sector, el resultado es dispar. Por ejemplo, mientras que los fondos que se fijan en las inmobiliarias asiáticas se anotan rentabilidades medias del 19,22% en el año, los que fijan sus miras en Europa sólo logran ganancias del 1,53%.
Caso aparte merecen los fondos que invierten en sociedades cotizadas estadounidenses (REITS, por sus siglas en inglés). Aunque los expertos defienden que al haber sido los primeros en sufrir las consecuencias derivadas de la crisis subprime, serán los primeros en recuperarse, lo cierto es que esta esperada recuperación aún ni se vislumbra.
Un ejemplo, las pérdidas de algunos de estos productos como Neuberger US Real Estate o Davis Real Estate superan ya los dígitos en lo que va de año.