Empresas y finanzas

Nueva subasta del BCE a tres años: la banca española pedirá 100.000 millones

El presidente del BCE, Mario Draghi

Este miércoles el Banco Central Europeo (BCE) celebra su segunda subasta a tres años en la que se espera una demanda por parte de la banca española de alrededor de 100.000 millones de euros.

En la primera subasta, que tuvo lugar el pasado 21 de diciembre, la institución prestó un total de 489.000 millones de euros a 523 bancos europeos a un plazo de tres años y a un tipo de interés fijo del 1%. Entonces, las entidades españolas se hicieron con alrededor de una cuarta parte del total.

David Cano, de Analistas Financieros Internacionales (AFI), espera que la segunda subasta vuelva a ser un "éxito", con una demanda ligeramente inferior a la de la primera, en torno a los 400.000 ó 450.000 millones de euros. Los bancos españoles e italianos serán los que más dinero soliciten en la operación, que en el caso de los españoles representará alrededor de un 20% o 25%.

Por su parte, en declaraciones a Europa Press, el estratega de mercados de IG Markets, Daniel Pingarrón, señala que el rango que maneja el mercado es bastante amplio, de entre 450.000 y 600.000 millones de euros, cifra que incluso podría ascender hasta 700.000 millones de euros si finalmente participan las financieras automovilísticas.

En esta línea, cree que las entidades españolas e italianas acapararán casi el 50% del total subastado, ya que estas operaciones estaban pensadas para los bancos de ambos países, que son los que más necesidades tienen y los que más aprovechan para atender a sus tesoros. En el caso de España, alcanzarán entre 100.000 y 125.000 millones.

El objetivo inicial de esta medida extraordinaria es revivir el flujo crediticio a través del sistema bancario para que llegue hasta las familias y las empresas, especialmente las de tamaño pequeño y mediano, que son las que más empleo crean en Europa.

El economista jefe de Intermoney, Jose Carlos Díez, apunta que la subasta es una "excelente noticia", porque va a permitir la entrada de liquidez en España, pero advirte de que ésta es una condición "necesaria, pero no suficiente", ya que es necesario que regresen los flujos privados.

El carry trade

La subasta del BCE a tres años, la primera, también ha servido para que algunos bancos tomen prestado el dinero de la institución a condiciones muy baratas para comprar deuda soberana de países periféricos con vencimientos de dos o tres años, que ofrece una rentabilidad mucho más elevada.

Se trata de una especie de operación de carry trade (tomar prestado barato para invertirlo donde la rentabilidad es mayor).

Según los datos que publicó ayer el BCE, las entidades españolas compraron deuda soberana por valor de 23.100 millones en enero, lo que supone un nuevo récord. En total tienen 229.600 millones de euros en este tipo de títulos gubernamentales de países de la Eurozona, de los cuales 119.000 millones son en letras y obligaciones del Estado español.

El estigma de pedir dinero al BCE

Desde AFI creen que ha desaparecido el "estigma" que suponía hace unos meses pedir dinero al banco central, y ahora no se ve como una posición más débil del sistema financiero, sino como la intención de aprovechar unas condiciones de financiación "muy ventajosas" en cuanto al tipo y, sobre todo, al plazo.

Pingarrón cree que el dinero repartido por el BCE en esta subasta podría trasladarse en mayor medida a la economía real en comparación con la de diciembre, aunque "no hay ninguna garantía". Así, señala que, dado que en la mayoría de los casos ya no necesitarán los fondos para sanear sus balances, esta inyección de liquidez podría hacer que aumente el crédito.

¿Nuevas subastas a tres años?

Por otro lado, desde IG Markets, destacan que esta es la última de las dos subastas de liquidez a tres años, pero ven posible que se celebren nuevas operaciones similares en un futuro si la economía europea y los mercados empeoran.

David Cano, de AFI, confía en que no haya nuevas subastas de liquidez, porque esto significaría que la situación está normalizándose, pero recuerda que el BCE ha dejado claro que tiene herramientas a su disposición. "Si la situación financiera no mejora no se pueden descartar nuevas operaciones", agrega.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky