Sufrir una avería en el coche es la causa que motiva ocho de cada 10 llamadas que realizan los conductores a su aseguradora de automóviles, mientras que los accidentes, sin embargo, sólo provocan el 10 por ciento de todos los partes de siniestros que las aseguradoras reciben. Estos datos se desprenden de una proyección realizada sobre la propia cartera de MAPFRE FAMILIAR, entidad líder en el seguro de Automóviles, con una cuota de mercado del 21 por ciento y cerca de 5,5 millones de vehículos asegurados.
La avería más común es un fallo o descarga de la batería, circunstancia que está detrás de más de uno de cada tres partes; el 23,4 por ciento de las averías están relacionadas con problemas mecánicos, como fallos en el embrague o en los frenos, y dos de cada 10 corresponden a averías en el motor.
Los accidentes son la segunda causa de aviso al seguro, aunque a gran distancia de las averías, y en la mayoría de los casos (el 54,3 por ciento) sólo está involucrado un vehículo, mientras que en el 45,7 por ciento de los casos existen varios automóviles implicados en el accidente.
Pinchar un neumático es la circunstancia que motiva una llamada al seguro en seis de cada 100 casos. Asimismo, perder o sufrir el robo de las llaves del coche es la causa para dar un parte en casi el 1 por ciento de los casos y quedarse sin combustible o repostar uno erróneo acapara el 0,7 por ciento de todos los partes.
MAPFRE ha tramitado hasta noviembre 1,2 millones de partes de siniestros de Automóviles y ha prestado casi 2 millones de servicios a sus clientes, la mayoría de ellos de grúas (1.682.583). En cuatro de cada 10 casos en los que los clientes de MAPFRE han solicitado el servicio de grúa por una avería, ésta se ha solucionado in situ, mientras que en uno de cada tres casos no se pudo solucionar en el lugar porque se trataba de una avería compleja o implicaba el cambio de piezas diferentes a los neumáticos
