Enero sirve tradicionalmente de amuleto para los mercados. La historia ha demostrado que un mes de enero alcista vaticina un buen año de bolsa o, al menos, aleja a los inversores de los números rojos. Este apriorismo se ha cumplido en el 75% de las ocasiones en las que Ibex 35 ha despedido enero con alzas en las últimas dos décadas.
Esta correlación podría cumplirse un año más si la bolsa española continúa este mes con el ritmo visto desde la segunda quincena de diciembre. Entonces, cuando el mercado dudaba del tradicional rally navideño, el Ibex sorprendió con la mayor subida de la última década al apuntarse cerca de un 7% en las últimas diez sesiones bursátiles del año. Y el ritmo de compras, por el momento, no ha cesado en los primeros días de 2014 al apoyarse los inversores en la relajación de la prima de riesgo por debajo de los 200 puntos básicos.
En esta ocasión, con sólo cuatro días de bolsa acumulados en el nuevo año, el parqué español consigue marcar máximos de dos años y medio al apuntarse una subida anual del 2,64 por ciento en gran parte gracias al buen comportamiento de los valores bancarios.
Recuperados los 10.100 puntos, y con el propósito puesto ahora en los 10.500, las firmas de inversión mantienen a la renta variable como el activo favorito para 2014 -sobreponderan Europa (incluyendo España) y Japón frente a Estados Unidos- siempre y cuando lleguen mejoras en las previsiones de beneficio de las compañías que abaraten la inversión.
Y es que, por ejemplo, el Ibex 35 cotiza actualmente a un PER -veces en que el beneficio queda recogido en el precio de la acción- de 15,2 veces, frente a las 12 veces a las que lo hacía a principios del año pasado.
¿Se repetirá la historia?
El mercado español tiene a su favor los aforismos bursátiles. En los últimos veinte años (2013-1994, ambos inclusives) el mes de enero ha sido alcista hasta en doce veces, aunque han sido en nueve ocasiones en las que estas subidas se han materializado finalmente en un ejercicio alcista.
No hay que irse muy lejos para ver cumplido este tópico bursátil. En 2013, el mes de enero se saldó con una subida del 2,39 por ciento y con un alza del 21,42 por ciento en el conjunto del año. Y previamente hay que remontarse a antes de la crisis, concretamente a los años comprendidos entre 2004 y 2007, para ver que el enero alcista anticipaba un año en positivo.
No obstante, los ejercicios más positivos fueron los de finales de la década de los noventa, cuando la bolsa española se apuntó subidas superiores al 35% e incluso a rondar alzas del 42%.
Sólo en tres ejercicios de los últimos veinte años se rompió esta vieja tradición. Fue en 1994, cuando cerró el primer mes con un repunte del 10% y despidió el año con caídas de más del 14%. También 2001 y 2011 se saldaron con caídas del 7,8 y del 13%, respectivamente, pese a las alzas del primer mes.
Un cierre de 2013 brillante en Europa
