Abertis prosigue en su estrategia de concentrarse en el negocio de las concesiones de infraestructuras viarias y ya tiene planificada la independencia de su filial de telecomunicaciones.
Según anunció ayer a los analistas el director financiero y de desarrollo corporativo del grupo, José Aljaro, "se tiende a que Abertis Telecom sea independientemente y afronte su propia deuda y su financiación, una estructura que permita, en el tiempo, dar entrada a un potencial socio".
Por el momento, los planes de Aljaro pasan por que Abertis Telecom vaya asumiendo su propia deuda y "restar pasivo con recurso a la matriz" de forma que poco a poco se convertirá en una empresa autónoma "abriendo así el camino a una nueva configuración".
Abertis Telecom agrupa todos los negocios de gestión de infraestructuras de telecomunicaciones del grupo y el año pasado registró una facturación de 511 millones de euros, un 3,6 por ciento más que en 2012. La filial posee una participación de control del grupo en Hispasat, así como la primera red de emplazamientos para la difusión y distribución de señales de radio y televisión en España y torres de telefonía móvil. También mantiene una participación del 5 por ciento en Eutelsat, entre otros activos y negocios.
La segregación o venta de activos en Abertis no es algo nuevo, ya que el grupo que dirige Francisco Reynés ya segregó la filial de aparcamientos y logística Saba y, durante los últimos meses, ha casi liquidado sus filiales aeroportuarias. La compañía controlada por La Caixa, la constructora OHL y y el fondo de capital riesgo CVC busca sacar la máxima rentabilidad a sus activos para hacer caja y reinvertirla en nuevas concesiones viarias o, como ocurrió en el caso de Saba, realizar una retribución adicional a sus accionistas.
Pese a ello, durante la presentación a analistas, la compañía ratificó su apuesta por el crecimiento internacional tanto a través de su negocio de autopistas, como en el de telecomunicaciones. El año pasado Abertis logró un beneficio neto de 617 millones, un 40 por ciento menos, por el efecto de las menores plusvalías contabilizadas respecto a un año antes, cuando vendió parte de su participación en Eutelsat. Para 2014, el grupo prevé lograr un beneficio neto de 650 millones, un 5,3 por ciento superior al de 2013, y un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 3.100 millones.