La automovilística japonesa Honda Motor ha confirmado este lunes que, como se venía especulando durante la última semana, llamará a talleres más de dos millones de vehículos en todo el mundo por el mismo defecto en el airbag, por el que Toyota revisará también 2,27 millones de coches, y que podría suponer un riesgo de incendio.
Honda ha hecho público que la llamada a revisión abarca alrededor de 2.033.000 vehículos de 13 modelos distintos producidos entre agosto de 2000 y diciembre de 2005, y entre los que cuenta más de un millón de unidades en Norteamérica y 668.000 en Japón.
El dispositivo de inflado del airbag del pasajero delantero, fabricado por la también nipona Takata, podrían haberse ensamblado con un componente producido incorrectamente, explica el tercer mayor fabricante de Japón, lo cual podría llevar a que se rompa en caso de accidente, generando un riesgo de incendio o lesiones de pasajeros.
El mismo problema en el inflador del airbag también afecta a más de dos millones de coches fabricados por Toyota, que iniciaba una nueva llamada a revisión para reparar las unidades defectuosas. Toyota actuó después de recibir la queja de un cliente japonés que vio cómo su asiento se quemaba por el fallo; sin embargo, Honda asegura no haber recibido queja alguna de lesiones de ninguno de sus clientes.
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