La gran duda del inversor hoy es a qué precio se producirá la 'macroampliación' de la entidad que preside Ángel Ron. Lo único claro, por el momento, es que el precio de los nuevos títulos no será inferior a los 0,4 euros, porque en ese caso el banco recurriría a las ayudas públicas.
Un desplome del 23 por ciento en bolsa. Es el primer coste de la ampliación de capital que anunció el Banco Popular hace dos semanas. Un pequeño precio si el objetivo es seguir siendo independiente. La presión bajista sobre el título es evidente, como lo es el fuerte descuento que exige ahora una operación de este tamaño. Por un lado, el accionista minoritario se plantea si acudir o no a la colocación y, por otro, si vender ahora y comprar más tarde a precios inferiores para tener los derechos preferentes de suscripción. Y también está el inversor que no tiene acciones de la entidad y valora comprar para conseguir esos derechos y participar en la ampliación. ¿Cuándo sería un momento de entrar? ¿Qué precios pueden resultar interesantes?
Desde un punto de vista técnico, Luis Lorenzo, analista de Dif Broker, apunta a que "la estrategia de entrada estaría en el soporte de los mínimos anuales [1,285 euros] y la zona de 1 euro, como proyección de caída en caso de perder esos niveles". De momento, Popular resiste por encima de este mínimo, que coincide con su precio más bajo de las dos últimas décadas, ya que finalizó la semana en los 1,308 euros.
En el caso de que el valor siga bajando durante la operación hasta acercarse al precio de emisión de los nuevos títulos, los accionistas que sigan en Popular se verán algo presionados a acudir a la colocación, ya que si quieren vender sus derechos saldrían perjudicados por la caída. "Un comportamiento así del mercado penaliza a los inversores que no quieren invertir más y venden sus derechos, y beneficia a los nuevos inversores", explica Nicolás López, desde MG Valores.
Los descuentos previstos
Lo único que de momento está claro es el precio mínimo al que se colocarán estos nuevos títulos: 0,4 euros. Y es que el banco que preside Ángel Ron situó este suelo al anunciar que emitirá un máximo de 6.250 millones de acciones para lograr hasta 2.500 millones de euros. Si, como muchos analistas auguran, el descuento de la operación ronda el 50 por ciento, el mercado podría presionar en bolsa al título hasta llevarlo a un mínimo de 0,8 euros.
Ahora bien, los expertos creen que el techo marcado para el número de acciones es demasiado alto. "Me resulta díficil pensar en que se vaya a emitir el máximo de acciones establecido, supondría un precio por título de 0,4 euros y un descuento cercano al 80 por ciento [frente al precio previo al anuncio de la ampliación, 1,701 euros]. Yo apuntaría más a un descuento en un rango entre el 45-55 por ciento", prevé Nuria Álvarez, de Renta 4. Esta rebaja estimada supondría que la emisión se llevase a cabo a un precio entre los 0,76 y los 0,93 euros.
Desde Inversis, la expectativa es que Popular se verá obligado a ir a la parte baja y lanzar las nuevas acciones a 0,5-0,6 euros. Si estos precios incluyeran un descuento del 50 por ciento, los niveles más bajos para comprar derechos antes de la operación podrían estar alrededor de los 1-1,2 euros.
No obstante, hay expertos que consideran que la rebaja puede ser mucho más alta. "Dada la situación del banco y en las circunstancias actuales del sector, prevemos que el precio de las nuevas acciones cotice con un descuento de entre el 43 y el 75 por ciento respecto al precio del mercado", indica Juan Pedro Zamora, de XTB. A los precios de cierre del viernes, esto supondría hablar de niveles entre los 0,33 y los 0,75 euros.
Un nuevo reclamo para el particular
Por el momento, todo esto son hipótesis a la espera de que el banco anuncie el descuento definitivo necesario con el que saldrán los derechos de la ampliación si quieren atraer tanto al inversor institucional como al minorista. Precisamente en estos últimos es donde se librará la batalla, ya que, por un lado, los institucionales apenas representan un 18,45 por ciento del Popular y, por otro, los accionistas de referencia han hecho un pacto por el que si alguno de ellos decide no acudir a la operación se comprometen a sobresuscribir títulos para conservar el 40 por ciento del capital y así evitar la dilución.
La importancia de los particulares -tienen el 47,45 por ciento del capital- es tal que el Popular ha puesto toda la carne en el asador lanzando el Depósito Ampliación, con un 8 por ciento TAE para los clientes y accionistas que acudan a la colocación. También hay un gancho para el inversor que no sea accionista: la Cuenta Ampliación, a un 8 por ciento, con liquidación vencida.
Pero ni la promesa de conservar la independencia del banco ni el gran descuento que se intuye en la emisión suavizan la consistente recomendación de venta que el consenso da a Popular. "La opción que recomendaría a los accionistas sería la llamada operación neutra, que consiste en vender una parte de los derechos y con ese dinero suscribir el resto de derechos de tal forma que nuestra inversión se mantenga constante", señala Nicolás López. "Después, si durante la ampliación el precio baja mucho, se podría plantear comprar más acciones", añade.
Popular tiene a muchos a quien mirar para ver cómo puede impactar en su cotización la ampliación de capital. Banco Santander, Unicredit y Espirito Santo son alguno de ellos. En el caso de la entidad española fue el 10 de noviembre de 2008 cuando sorprendió anunciando una ampliación con derecho de suscripción preferente por un importe efectivo de 7.194 millones mediante la emisión de 1.598 millones de acciones a 4,5 euros que comenzarían a contratarse el 4 de diciembre. Sería la segunda operación de este tipo en el año, antes había hecho otra para adquirir la entidad británica Alliance & Leicester, y sus títulos respondieron a la noticia con caídas del 5 por ciento, hasta los 6,5932 euros, y con pérdidas de más del 30 por ciento en los primeros diez días. Sería en febrero cuando perdería los 4,5 euros -cayó hasta los 3,57 euros-, un precio que ha cedido en más de una veintena de sesiones desde entonces.