
El fabricante de coches eléctricos Tesla acaba de presentar su primer modelo de tracción integral. Se trata del 85D, especialmente destinado a los países fríos, donde la máxima motricidad se hace indispensable para circular por carreteras heladas o nevadas.
La tecnología aplicada por Tesla para conseguir transmisión de fuerza a las cuatro ruedas es simple. Sencillamente se ha añadido un segundo motor, más pequeño, sobre el tren delantero para dotar a ambos ejes de tracción. La adopción de este nuevo motor ha hecho que el maletero delantero pierda capacidad, pasando de los anteriores 150 litros a los 85 actuales. Pero resulta un detalle de poca importancia si tenemos en cuenta que el maletero posterior del Tesla S sobre el que se ha desarrollado la nueva transmisión dispone de 750 litros.
Velocidad limitada
El Tesla de transmisión integral ofrece desde su comercialización dos potencias diferentes. En el 85D básico el sistema bimotor rinde un total de 380 caballos, pero en el denominado P85D, los motores liberan 476 caballos al tren trasero y 224 al delantero, con lo que se dispone bajo el pie del acelerador de la misma potencia que la de un Lamborghini Aventador.
Pero en el Tesla disponemos además de la ventaja de disponer de toda la fuerza desde la primera vuelta de revoluciones, pudiendo acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en tan sólo 3,4 segundos. La velocidad máxima sin embargo se ha limitado a 250 kilómetros por hora.
El Tesla S 85D sale al mercado con un precio de 100.500 euros.