
Las últimas previsiones del Fondo Monetario Internacional han colocado a España como la 'locomotora' de la eurozona. Según este organismo internacional, el PIB de España crecerá en 2014 un 1,3%, mientras que en 2015 los hará un 1,7%.
Ahora que España vuelve a crecer y a generar empleo de forma moderada, parece que los problemas vienen de fuera. Y es que, según las mismas previsiones del FMI, la eurozona tiene unas posibilidades de entre el 35% y el 40% de volver a entrar en recesión. De Guindos: "España no es inmune a la desaceleración de la eurozona"
Y es que, las dos economías más grandes de la unión monetaria han visto recortadas sus previsiones de crecimiento. Alemania crecerá en 2014 un 1,4% y un 1,5% en 2015, frente al 1,9% y 1,7% de las anteriores previsiones. Francia aún lo tiene peor, el FMI ha recortado su estimación de crecimiento en medio punto porcentual, tanto en 2014 como en 2015, el PIB galo crecerá un 0,4% este año y 1% el próximo.
Las exportaciones
España puede ser una de las grandes damnificadas por el estancamiento de la eurozona. Las exportaciones se han convertido en el motor para salir de la crisis, según datos de Eurostat, el peso de las exportaciones en el PIB español han pasado de representar el 26% al 34%. Dos tercios de los bienes y servicios exportados desde España tienen como destino la Unión Europea y un 50% la eurozona.
Con estos datos, es lógico pensar que un estancamiento del crecimiento de los principales socios comerciales de España afectará de forma negativa a la economía nacional. Además, cuatro de los cinco principales importadores de bienes y servicios europeos pertenecen a la eurozona. El 45% de las exportaciones españolas van hacia cuatro Estados 'euro': Alemania (15%), Francia (10%), Italia (7,7%) y Portugal (7,1%), según el Observatory of Economic Complexity.
Francia y Alemania son el destino del 25% de las exportaciones españoles, además de ser dos de los Estados a los que el FMI ha recortado con mayor contundencia sus previsiones de crecimiento. Si la economía de estos dos países no marcha bien, las exportaciones españolas pueden verse seriamente afectadas, ante una más que previsible caída de la demanda interna en estas economías.
El turismo
El otro sector que podría verse seriamente afectado por el estancamiento de la eurozona es el turismo. Británicos, franceses y alemanes representan el 56% de los turistas que llegan a España. Según informa el Banco de España en un estudio publicado en abril de este año, la concentración geográfica del turismo puede ser negativa si la crisis se agudiza en los países emisores de turismo. Los turistas franceses eligen España.
José Luiz Zoreda, vicepresidente de Exceltur explica en Libre Mercado que prevén "una notable desaceleración de la actividad turísitica en el cuarto trimestre respecto al mismo periodo del año anterior", debido a la desaceleración de la economía en países emisores de turistas.
La pregunta final es si España puede ir contracorriente, proseguir con la tendencia positiva mientras Europa se frena. Ángel Laborda, director de coyuntura de Funcas señala en El País que España puede seguir creciendo "durante unos cuantos trimestres, sobre todo teniendo en cuenta la mejora prevista de las condiciones crediticias y las rebajas fiscales. Pero eso sería a costa de generar de nuevo déficit en la balanza de pago, lo cual es una senda nada recomendable para una economía tan endeudada. A medio plazo es casi imposible que España crezca de forma significativa si Europa entra en recesión o esta estancada", sentencia Laborda.