Jornada de ligeras ganancias en la Bolsa de Tokio, que cierra así una semana donde se han acabado imponiendo las caídas de forma clara pero no contundente. Esto es así en la medida que los bajistas no han logrado que a cierre de hoy viernes se perdieran los mínimos de la semana pasada, lo cual es indicativo de su falta de potencia.
Con todo, seguimos considerando que la corrección iniciada el pasado lunes sigue todavía vigente y no podemos descartar aún que después de un cierto rebote a corto se vuelvan a imponer las caídas en un nuevo tramo que podría llevar al índice a buscar apoyo a la zona de antigua resistencia y ahora soporte de los 9500/600 puntos. Ahí habrá que estar atentos toda vez que la actual fase correctiva / consolidativa podría ser un simple pull back, tras el cual entendemos que las subidas podrían reanudarse.
Alejaría el riesgo bajista a corto y sería una señal de enorme fortaleza si la presión compradora logra que el Índice Nikkei recupere en próximas sesiones niveles de 10040 puntos, lo que habilitaría el cierre del hueco generado el 16 de junio a la baja y por consiguiente cancelaría las implicaciones bajistas de la ISLA que ha dejado la curva de precios y que a día de hoy sería la única nota preocupante para los alcistas.
Tendencialmente seguimos considerando que todavía es pronto para favorecer el inicio de una corrección que sirva para ajustar las subidas iniciadas en los mínimos de marzo a la altura de los 7000 enteros y podríamos estar delante de un simple proceso de ajuste del último tramo alcista iniciado en los 9000 puntos y perfectamente visible en gráfico semanal. Si esto es así las caídas podrían estar encontrar freno próximamente.
