El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, reiteró que la principal prioridad del Gobierno contra la crisis es el empleo, pero descartó que una reforma laboral vaya a servir para recuperar la actividad económica, puesto que su origen es financiero.
Corbacho pronunció la conferencia El mercado de trabajo en España: retos y realidades en el Club Siglo XXI, en Madrid, durante la cual dijo que no es fácil analizar los retos y realidades del mercado de trabajo porque se está atravesando el contexto socioeconómico más "cambiante, imprevisible y novedoso desde hace más de treinta años".
En su opinión, la crisis financiera ha inducido un "frenazo" en la actividad que ha terminado por afectar "de forma especial" al empleo. Como ejemplos recordó que la ocupación ha descendido en tres de los últimos cuatrimestres y que, en términos anuales, es la "primera vez" que desciende el empleo desde 1994, lo que ha elevado la tasa de paro al 11,3 por ciento. En esta evolución han incidido de forma especial dos aspectos diferenciales respecto a Europa: el fuerte peso de la construcción y el aumento de la población activa, explicó.