Los dos sindicatos mayoritarios españoles, Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), han convocado 57 manifestaciones en el país contra la reforma laboral impulsada por el gobierno, con la que se busca poner fin al alto índice de desempleo, que alcanza el 23% de la población activa de país.
Las manifestaciones, bajo el lema ?No a la reforma laboral injusta con los trabajadores, ineficaz para la economía e inútil para el empleo?, tendrán lugar en Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Toledo, entre otras ciudades españolas.
Los sindicatos nacionalistas también han llamado a huelgas generales para el próximo 29 de marzo, en tres regiones españolas: Galicia (noroeste) y País Vasco y Navarra (norte).
Desde la oposición de izquierda y los sindicatos se denuncia que la reforma ha abaratado los despidos y generalizado la indemnización con solo 20 días por año trabajado, además de dar total libertad a las empresas para despedir y reducir salarios, entre otra pérdida de derechos.
La reforma ?es brutal. Abarata, facilita y desjudicializa el despido como única solución por parte del gobierno? para combatir el desempleo, manifestó Ignacio Fernández Toxo, vocero del sindicato Comisiones Obreras.
?Hay temor a la pérdida del puesto de trabajo. Hay que hacer un esfuerzo para explicar a la gente que hay otra forma de hacer las cosas (...). Hay que motivar a la ciudadanía?, dijo Fernández, agregando que su organización quiere convertir las calles en un ?clamor contra la reforma?.
La reforma aprobada por el gobierno del conservador Mariano Rajoy, posesionado en diciembre pasado, abarata el despido y crea en contrapartida un nuevo contrato que permitirá por primera vez cobrar salario y prestación por desempleo, en un intento por contener la hemorragia del mercado de trabajo en España.