Los accionistas del grupo financiero holandés ING votaron hoy en junta general extraordinaria a favor de la reestructuración del grupo, que segregará sus negocios de banca y seguros, así como el lanzamiento de una ampliación de capital por importe de 7.500 millones de euros para devolver parte de las ayudas públicas recibidas.
De este modo, ING Group se dividirá en dos para separar operaciones bancarias y de seguros en el marco de una reordenación estratégica emprendida conforme a un acuerdo con la Comisión Europea que se ejecutará durante los próximos años, durante los cuales venderá todas las operaciones de seguros.
El grupo "explorará todas las opciones existentes" para estas desinversiones incluyendo salidas a bolsa, ventas y otro tipo de transacciones, especificó ING, que cumple así con los requerimientos de Bruselas en un proceso que dejará al grupo con operaciones esencialmente europeas y algunas unidades de negocio pequeñas en otras regiones.