El presidente de la CECA, Juan Ramón Quintás, que ha asistido esta noche a la inauguración de la nueva sede de Caja Guadalajara, ha dicho que "durante bastantes meses, quizás años" los ingresos de las cajas de ahorro "se van a deprimir profundamente" y que "el año que viene va a ser el primero serio".
El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y el de Caja Guadalajara, José Luis Ros, han participado también en la inauguración de la nueva sede, un edificio de quince plantas situado junto a la autovía A-2.
El presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) ha dicho que las cuentas de resultados sufrirán el impacto de la pérdidas que les ocasionan los préstamos que no devuelven y que "van a aumentar los requerimientos de capital para funcionar"; es "la triste tragedia", ha añadido Quintás.
En ese sentido, Quintás ha apuntado que "el hundimiento de ingresos y el aumento de los requerimientos de capital sólo se puede combatir bajando los gastos de funcionamiento", algo que, ha agregado: "en España sabemos hacer".
Austeridad extrema
Habrá que hacerlo -ha continuado- "con una austeridad extrema o bien con alianzas que permitan reducir gastos", o con la "integración" de distintas entidades.
"Ante un reto de esta envergadura lo único que no se debe hacer es quedarse parado", ha dicho Quintás, que ha recordado que muchas empresas cerraron por tener miedo y se quedaron "quietas".
Ese error Quintás cree que no lo va a cometer Caja Guadalajara.
De la entidad de ahorro guadalajareña, Quintás ha destacado que "es una gran caja, una gran empresa que ha tenido imaginación de diseñar una obra social que muy pocas instituciones de Europa han tenido la brillantez de conseguir".
El presidente de Caja Guadalajara, José Luis Ros, ha resaltado que cualquier decisión que la Caja tome será pensando en sus clientes y en sus empleados y siendo leales con su territorio.
"Los zapatos no nos aprietan", ha dicho Ros, para añadir: "pero no somos tan inconscientes como para no saber que hay una reconversión financiera en marcha".
Salir bien parados de la crisis
Cualquier decisión sobre una integración de Caja Guadalajara con otra entidad "la adoptan los órganos de la Caja", ha indicado Ros, que ha recordado que la Caja está "saneada".
También ha afirmado Ros que a él no le mueve ninguna consigna política y que los profesionales de Caja Guadalajara toman las decisiones "de manera autónoma".
Barreda, en referencia a la crisis, ha dicho que "hay que hacer de la necesidad virtud y ser capaces de salir bien parados de una situación extraordinariamente complicada".
"Y respetando las reglas del juego", ha agregado Barreda, que ha señalado que desde la Junta de Castilla-La Mancha se respeta la autonomía de las entidades financieras.
"Vamos a ayudarlas en lo que planteen sin sustituir su autonomía", ha subrayado Barreda.
Sobre Caja Guadalajara, Barreda ha resaltado que inicia "una nueva etapa importante que dará de sí lo que la sociedad de Guadalajara decida".
La antigua sede de Caja Guadalajara, en el casco histórico de la ciudad castellana, fue adquirida por el Gobierno de Castilla-La Mancha por 17 millones de euros para ubicar oficinas de sus delegaciones provinciales.