Agredir verbalmente a los compañeros de trabajo e insultarles hasta "colocarles en situación de verdadera angustia y desesperación" y, además, apoderarse de material de la empresa es motivo suficiente para el despido, según una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ).
El tribunal, en su resolución de la sala de lo social, ha desestimado el recurso presentado por un trabajador del sector del metal contra la sentencia dictada por un Juzgado de lo Social de Murcia, que en noviembre pasado declaró procedente el despido efectuado por su empresa, "T.B.".
La Sala de lo Social del TSJ concluye su sentencia con la desestimación del recurso presentado por el trabajador y comenta que éste ha cometido "una falta muy grave de deslealtad y abuso de confianza, y fraude, con perjuicio de la empresa, lo que motiva suficientemente el despido procedente del mismo".