
Quedan deberes por hacer. El presidente Mariano Rajoy ha avanzado hoy que "pronto" se aprobarán nuevas medidas económicas que tendrán como objetivo, "por difíciles que sean", crecer y crear empleo. El jefe del Ejecutivo no ha dado detalles sobre cuáles serán los próximos ajustes o reformas que se llevarán a cabo, pero Bruselas ya ha señalado que vigilá a España muy de cerca tras el rescate bancario.
Rajoy ha lanzado este mensaje en la clausura de la Asamblea general de la CEOE, ante la que ha ratificado que continuará con su política de austeridad para reducir el déficit y de reformas estructurales para ganar flexibilidad y competitividad.
Según ha apuntado, las turbulencias no alejan al Gobierno de la ruta porque sabía que llegarían. "Las turbulencias forman parte inevitable de la salida de la crisis, ahora toca superarlas, estamos en el camino para hacerlo, nada nos va a apartar de él y vamos a continuar con esa decisión hasta el final", ha manifestado.
Apenas habló del rescate a la banca
Durante su intervención en la Asamblea General de la CEOE, Rajoy no ha entrado en más detalles y ha realizado un discurso 'muy europeo', centrado en la necesidad de que los países de la UE y el Consejo Europeo que se celebra esta semana lancen el mensaje de que el euro es un proyecto "irreversible".
En su discurso, el presidente apenas ha hecho mención al rescate a la banca que el Gobierno español ha pedido de manera formal al Eurogrupo este mismo lunes y se ha limitado a recordar las cifras ofrecidas por Oliver Wyman y Roland Berger en sus evaluaciones (hasta 62.000 millones de euros en el escenario más adverso).
Rajoy ha indicado que las entidades deberán hacer un esfuerzo importante por recapitalizarse y, ha recordado, que "si no llegan por sí mismas", España cuenta con "sus socios europeos", que a su vez también pedirán esfuerzos a las entidades que reciban esas ayuda.
"La finalidad de este ejercicio es acabar con la incertidumbre en los mercados y lograr que el crédito llegue a familias y empresas", ha subrayado el presidente del Gobierno.
Rajoy mantuvo su tesis de que el rescate "es un paso esencial para activar el crédito" junto al resto de las reformas que ha emprendido en seis meses de mandato y de las que, avanzó, vendrán en los próximos meses. Reconoció que todos estos cambios "no surten efectos en la economía y el empleo en un corto espacio de tiempo" pero aportan "confianza y credibilidad" en la economía, que en su opinión resulta "esencial para solucionar el problema de financiación y de liquidez".
Pide una "autoridad fiscal" en la UE
Asimismo, pidió que las reformas nacionales vayan acompañadas de un conjunto de cambios estructurales en la Unión Europea con el fin de "disipar las incertidumbres sobre la zona euro". Afirmó que la UE necesita realizar "acciones conjuntas" que profundicen en la unidad, especialmente para avanzar hacia una integración fiscal y bancaria. Rajoy pidió expresamente la creación de una "autoridad fiscal" en la UE que coordine a los países miembros, que marque orientaciones en la elaboración de los presupuestos nacionales y que reduzca las "asimetrías entre estados".
Como culminación, adujo que este proceso de reformas debería finalizar con la creación de una agencia europea de deuda que realice emisiones conjuntas y con un supervisor bancario comunitario que disponga de un fondo de garantía de depósitos y de un fondo de ayuda a entidades. El presidente español confió en que todos estos pasos puedan definirse "con un calendario concreto" en el Consejo Europeo que los líderes de la UE van a celebrar este jueves y este viernes en Bruselas. "El mensaje político debe ser contundente y el calendario de integración claro para reestablecer la confianza en la estabilidad del euro", remachó.