El consejero de Pemex en Repsol, Arturo Henríquez, acaba de presentar su dimisión como miembro del consejo de la petrolera española.
La decisión se produce después de haber procedido a la venta de un paquete de acciones del 7,85 por ciento durante el día de hoy, lo que deja a la compañía mexicana sin derecho a un puesto en el máximo órgano de administración de la española.
La petrolera mexicana abandona el consejo con 900 millones de dólares de plusvalías reconocidas, sin tener en cuenta los dividendos, y con quejas por parte de su director general, Emilio Lozoya, de falta de entendimiento con los gestores de la empresa.