Sacyr Vallehermoso está dispuesta a poner toda la carne en el asador para ganar la guerra de opas que se ha desatado sobre Europistas. Por eso, se ha garantizado un crédito de hasta 750 millones de euros con Calyon. ¿Por qué está tan interesado Sacyr por Europistas...? Mañana, todas las claves en el diario elEconomista.
Esta financiación le permitiría disparar su oferta un 81,8 por ciento y pagar 11,19 euros por cada título de la concesionaria, frente a los 6,13 euros que, por el momento, ha puesto sobre la mesa. La propuesta de su rival Isolux es de 5,13 euros por acción. Sin embargo, ambas compañías pueden elevar sus ofertas en los sobres que entregarán al regulador (CNMV).
Pero los minoritarios deben valorar este músculo financiero con cuidado. La posibilidad de desembolsar hasta 750 millones no significa que Sacyr vaya a hacer uso de todo el crédito, pero sí indica que la constructora está dispuesta a pelear con todas sus armas para comprar Europistas.
En cambio, sus socios en la operación han sido mucho más conservadores. Las cajas vascas -BBK, Vital y Kutxa- se han garantizado un crédito de hasta 160 millones de euros. Esta cantidad les permitiría elevar la oferta que han realizado junto con Sacyr un 10,10 por ciento, hasta 6,74 euros por acción. Este precio, no obstante, es un cuatro por ciento inferior a los 7,01 euros que alcanzó ayer la concesionaria en bolsa.
Sacyr compra, las cajas apoyan
¿A qué responde la diferente financiación de Sacyr y las cajas? Por una parte, la constructora será quien compre la mayoría de las acciones. Según el folleto que aprobó ayer la CNMV, Sacyr adquirirá 67,3 millones de acciones, el 50 por ciento de todo el capital. En cambio, las entidades vascas ya controlan el 32,39 por ciento y sólo necesitan crédito para adquirir el 17,61 por ciento. Un porcentaje que, previsiblemente, no llegarán a comprar en su totalidad. Todo apunta a que algunos accionistas rechacen acudir a la opa para, así, formar parte del futuro gigante que se creará cuando fusionen esta sociedad con Itinere, filial de autopistas de Sacyr. Por eso, las cajas se han garantizado menos financiación, ya que confían en adquirir solamente un pequeño paquete de acciones.
De hecho, si Isolux sigue adelante con su oferta, Cintra está obligada a venderle a el 27,10 por ciento que tiene en Europistas, aunque pague menos. En el supuesto de que se cumpliera este escenario, las cajas vascas no deberían desembolsar ni un sólo euro en la opa.
Sentido estratégico
El músculo financiero que se ha garantizado Sacyr responde a una lógica estratégica. Si triunfa su opa, fusionará Itinere con Europistas y creará la quinta compañía de autopistas del mundo (cuarta si Abertis y Autostrade se fusionan). La valoración que realiza del futuro grupo rondará los 5.200 millones. Esta cifra es la suma de los 4.200 millones que concede a su filial más el precio al que termine comprando Europistas (ayer, al cierre de mercado, la concesionaria alcanzó una capitalización de 943,5 millones). No obstante, esta valoración está pendiente de recibir el visto bueno de un perito independiente.
En una plazo de dos años, Sacyr se ha comprometido con las cajas vascas a conseguir una liquidez mínima de 1.000 millones, equivalentes al 20 por ciento del capital. Estas cifras colocarán al futuro gigante en posición para ser incluido en el selectivo índice Ibex 35. No obstante, las entidades están dispuestas a concederle una prórroga de dos años más para conseguir la liquidez necesaria.
La fusión, que se llevaría a cabo en el primer semestre de 2007, supondría la absorción de Itinere por parte de Europistas. Además, Sacyr y las cajas vascas contemplan la posibilidad de realizar emisiones y ampliaciones de capital para inyectar más liquidez al grupo. La constructora se garantizará el control del nuevo grupo (es decir, como mínimo ostentará el 50 por ciento de las acciones), mientras que BBK, Vital y Kutxa controlarán, al menos, el cinco por ciento, tendrán dos consejeros y un miembro en la comisión ejecutiva.