
La entidad financiera ha anunciado su intención de obtener más de 6.600 millones de libras esterlinas (8.190 millones de euros) de sus inversores rechazando la oferta de rescate del gobierno británico. Además, planea reunir otros 3.000 millones adicionales mediante la suspensión del pago de dividendos para lo que resta de año, entre otras medidas.
"Dada la fuerza de los negocios diversificados de Barclays y la base de capital existente, la junta espera que el capital adicional se obtendrá de los inversores sin recurrir a la financiación gubernamental que nos fue ofrecida", afirmó Barclays en un comunicado.
Según ha explicado la entidad financiera británica, "no sería apropiado" abonar el último dividendo de 2008. Con esta decisión, además de otras medidas, obtendría nada menos que 3.500 millones de libras adicionales.
En cuanto a los 6.500 millones de libras que espera conseguir de sus inversores, 3.000 millones los reunirá mediante la emisión de acciones preferentes, otros 3.000 millones a partir de acciones ordinarias, mientras que para los 600 millones restantes ya se había trazado un plan de emisiones.
Barclays fue una de las entidades que, en un principio, habría solicitado la ayuda del Gobierno birtánico. En concreto, se decía que Reino Unido inyectaría 3.000 millones de euros como parte de su rescate con el que estabilizar del sistema bancario.
Sin embargo, la propia firma se encargó de desmentir "categoricamente" que hubiese solicitado la línea de financiación que ofrecía el Ejecutivo de Gordon Brown. "Barclays categóricamente no ha pedido capital al gobierno y que no tiene ninguna razón para hacerlo".