
Se espera que los precios de la energía en Alemania caigan a cero, e incluso que se conviertan en negativos, estas fiestas en Alemania, gracias a una combinación de vientos potentes y una demanda escasa por las temperaturas relativamente suaves para la época del año.
Los precios de la energía podrían estar por debajo de cero durante horas, e incluso días, conforme los vientos aumenten su intensidad y permitan generar más energía eólica, y a menos que las eléctricas decida echar el cierre a sus centrales térmicas de carbón y gas, tal como advierte la firma Markedskraft Deutschland.
Las previsiones estiman que el 25 de diciembre, la generación eólica alcance un máximo y duplique la media de los pasados 30 días, y todo ello en un mes de diciembre que es más cálido de lo normal y que va a cerrar el año más cálido del que se tiene constancia en Europa, como consecuencia del cambio climático provocado por el hombre.
Este extraño episodio de precios casi gratis podría marcar además el inicio de 2016, un ejercicio en el que se espera que las renovables suministren ya un tercio de toda la demanda bruta -en 2014 eran apenas el 20%- con más presión bajista en el mercado eléctrico.
Société Générale recuerda así que la clave para mantener la estabilidad de precios en el mercado eléctrico estará en los interruptores de las centrales basadas en carbono, puesto que la eólica fluctúa junto con el tiempo atmosférico y cuando el viento sopla tiene prioridad sobre las demás fuentes de generación.
Volviendo a lo que ocurrirá previsiblemente en los próximos días en Alemania, se estima que la eólica generará electricidad en un rango que va de los 10 a los 20 gigavatios, y alcanzará un pico de 25 gigavatios el 25 de diciembre. Para hacerse una idea de lo que significan estas cifras de potencia instantánea, basta con tener en cuenta que un solo gigavatio es suficiente como para alimentar 2 millones de hogares en Europa.
Paolo Coghe, analista en Societe Generale, explica que las eléctricas saben que el precio va a caer a cero en los próximos días, pero también bien conocen los costes de reducir su producción en las centrales, así que preferirán pagar -literalmente- por inyectar a la red kilovatios generados quemando carbón y gas que detener la producción en esas centrales. Eso, claro, siempre que el episodio de baja demanda y fuertes vientos no se mantenga en el tiempo.
No será, además, la primera vez que el mercado eléctrico alemán conoce un episodio de precios negativos. En la tarde del 24 de diciembre de 2012, el mercado 'vendía' el megavatio-hora a -56,87 euros. El periodo de vacaciones navideñas es especialmente propenso a estos episodios porque, con fábricas, oficinas y trenes parados, la demanda cae a mínimos anuales. Mientras, si el viento decide seguir soplando con fuerza, puede llegar a suministrar buena parte de las necesidades del mercado.