Mi madre siempre me ha dicho que las comparaciones son odiosas. Y tiene mucha razón, porque cada persona tiene sus particularidades. Sin embargo, en el mundo financiero existe otra realidad. La que marcan los números, bien sean por beneficio, eficiencia, rentabilidad, valor... Son los que sitúan a las empresas en un punto determinado de un ranking. Análisis de este tipo tienen mayor relevancia cuando una compañía no es conocida por los inversores. Esto es lo que le ocurre a la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).
La entidad con sede en Alicante debutará en el mercado el próximo 23 de julio, por lo que pasará a compararse con los bancos cotizados españoles. ¿Qué posición tiene dentro de las entidades financieras?
Para ubicarla lo mejor es utilizar el beneficio neto. Si se parte del resultado obtenido en 2007, la CAM se sitúa en sexto lugar por detrás de Bankinter (BKT.MC). Tuvo un beneficio neto de 385 millones de euros, frente a los 362 millones que consiguió Bankinter. Sin embargo, la entidad logró un crecimiento superior a la media. Mientras los bancos crecieron un 13,7 por ciento en 2007, la CAM incrementó sus resultados un 15 por ciento.
La otra cara
Si se compara por ratios bursátiles la foto no es tan atractiva. Por ejemplo, si se le aplica las estimaciones de crecimiento de beneficio del sector -se calcula un incremento del 7 por ciento en 2008- y se tiene en cuenta el PER al que cotizan las entidades españolas ahora -en torno a las 8,6 veces-, esta caja tendría un valor en mercado de 3.561,1 millones de euros. Así se coloca como la sexta entre las grandes. Supera a Bankinter, que tiene un valor de 2.723 millones de euros. Por delante de ella se sitúa Banco Sabadell (SAB.MC), que cerró el miércoles con un valor de mercado de 6.413 millones de euros.
Sin embargo, en el folleto de la colocación, la CAM se valora entre los 3.893 y los 4.866 millones de euros, lo que supone un PER (veces que el beneficio está incluid en el precio de la acción) superior a las nueve veces. "La infravaloración que presentan los grandes bancos, que cotizan con un PER de 9 veces y con una rentabilidad por dividendo en torno al 6 por ciento, resta atractivo a la colocación de cuotas de la CAM", explica Banca March.
Si se analiza esta entidad por su rentabilidad por dividendo, tampoco es de las más interesantes. Dependiendo del precio al que debuten sus cuotas participativas -se ha fijado una horquilla entre los 5,84 y los 7,3 euros-, esta entidad mimará a sus inversores con una rentabilidad del 2,96 y del 3,7 por ciento. Estos porcentajes se encuentran por debajo del sector bancario español, que ofrece un promedio del 6,03 por ciento este ejercicio.
La entidad ha decidido repartir entre sus accionistas un 7,5 por ciento de su beneficio individual (de la matriz). Si en 2007 esta caja tuvo un beneficio de 288 millones de euros, a los nuevos inversores les corresponderían 21,6 millones. Sin embargo, como dividendo en metálico, la CAM ha asegurado que dará como máximo el 50 por ciento de los 21,6 millones. Es decir, un accionista tendría por título 0,216 euros con este resultado. El resto del dinero se irá a las reservas de la caja.
Lo mejor
La mejor referencia para la CAM es el índice de mora -los créditos que no se han pagado-, que se limita al 0,69 por ciento, lo que la coloca como la tercera entidad con menos morosidad de España.