El Popular se une a la puja por el Novo Banco, el grupo formado con los activos buenos del BES. La entidad española finalmente ha decidido entrar en el proceso para analizar sus números y poder presentar una oferta para crecer en Portugal y, también, en España.
Según fuentes conocedoras de la operación, que coordina BNP Paribas, el banco que preside Ángel Ron ha comunicado ya al supervisor luso su interés por participar en subasta. Fuentes del Popular declinaron realizar comentarios al respecto. Mañana culmina el plazo para que los candidatos formalicen oficialmente su intención de realizar una propuesta de compra.
Hasta la fecha lo han hecho, al menos, el Santander, BPI -filial de La Caixa en el país vecino-, el chino Fosum y el fondo norteamericano Apollo.
Novo Banco está constituido conlos activos más sanos del BES, por valor de 70.000 millones de euros, de los que 3.600 millones proceden de la sucursal española, que ha conseguido frenar la sangría de depósitos producida en julio y septiembre, tras el rescate de la entidad portuguesa con 4.900 millones.
El objetivo es minorar esta factura con la venta rápida del banco. En el sector se da por hecho que ninguna de las ofertas alcanzarán dicha cantidad, por lo que tanto el Estado como el Fondo de Garantía de Depósitos, en manos del sector, tendrá que asumir pérdidas.
El Popular, de ganar la puja, daría un salto de gigante en Portugal. Opera en el país vecino a través de una franquicia con 170 oficinas y 1.300 empleados, que gestionan más de 9.000 millones en activos. Pero, además, incrementaría su negocio en España con la adquisición de los activos del antiguo BES en nuestro país. Durante la crisis, el Popular ha adquirido el Pastor y, recientemente, Citibank.
El gran competidor del Popular en la subasta será, según fuentes del mercado, Banco Santander, que tiene intención de hacerse con Novo Banco para más que duplicar su tamaño al otro lado de la frontera.
BBVA, en principio, no participará en la puja. El grupo ha puesto en marcha un plan para reducir su presencia en Portugal, después de haber fracasado en su intento de vender su filial antes del verano. El Sabadell tampoco.
El BES frena la sangría de depósitos
