Por Gene Emery
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un estudio revela que unprograma de entrega gratuita de anticonceptivos de acciónprolongada a las estadounidenses de entre 15 y 19 años redujo un79 por ciento la tasa de embarazo adolescente y un 77 por cientolos abortos en cinco años.
"Esto tiene gran importancia en Estados Unidos, donde eldesafío de reducir los embarazos no planificados es constante",aseguró Cynthia Harper, profesora de obstetricia, ginecología yservicios reproductivos de University of California, SanFrancisco.
"Estos resultados son sorprendentes por su alto impacto",agregó Harper, que no participó del estudio publicado en NewEngland Journal of Medicine.
Cada año, en Estados Unidos se registran más de 600.000embarazos adolescentes.
A los 20 años, el 20 por ciento de las adolescentescaucásicas y el 40 por ciento de las adolescentes hispanas yafroamericanas estarán embarazadas, según las estadísticas de laCampaña Nacional de Prevención del Embarazo Adolescente y NoPlanificado.
El nuevo estudio surge del Proyecto CHOICE de St. Louis. Seimplementó para comprobar si se podría disminuir la tasa deembarazo adolescente con un enfoque agresivo de entrega deinformación sobre el uso de anticonceptivos y su entregagratuita.
"Durante muchos años, los padres, los médicos y lasautoridades pensaron que esos métodos (de acción prolongada) noson para las adolescentes, que ellas los rechazarían, peropudimos demostrar que si se las orienta adecuadamente y sipueden optar, los van a elegir y utilizar con muy buenosresultados", dijo la autora principal, Gina Secura, de laFacultad de Medicina de Washington University, St. Louis.
A todas las adolescentes que concurrían a una clínica enbúsqueda de servicios anticonceptivos se les brindó informaciónsobre varios métodos, incluidos los anticonceptivos de acciónprolongada inyectables e implantables, como el DIU, que seutilizan en el mundo desde hace años y su efecto es reversible.
En Estados Unidos, menos del 5 por ciento de lasadolescentes utiliza esos métodos.
El 72 por ciento de las 1.404 adolescentes y mujeres queparticiparon del estudio optó por un DIU o un implante. El 12,5por ciento solicitó la píldora.
Los autores evaluaron a las voluntarias durante tres años,entre el 2008 y el 2013.
La tasa anual de embarazo fue del 3,40 por ciento, versus el15,85 por ciento detectado con una encuesta a adolescentes ymujeres sexualmente activas.
La probabilidad anual de tener un bebé fue del 1,94 porciento en las adolescentes de St. Louis, versus el 9,40 porciento en el país.
La tasa de aborto fue del 0,97 por ciento con la entregagratuita de los anticonceptivos de acción prolongada, versus el4,15 por ciento en el resto de Estados Unidos.
"Las adolescentes no conocen estos métodos y los médicos nolos indican", dijo Harper. Aconsejó que las jóvenes que quierancomenzar a utilizar un método anticonceptivo conversen primerocon sus médicos sobre cuál es el más efectivo porque, en estecaso, "la efectividad no es lo que se suele analizar".
"Observamos que las adolescentes que empezaban con losmétodos de acción más corta, como la píldora o el parche, altiempo comenzaban a olvidarse de utilizarlos. Entonces, pasabana un método de acción prolongada", dijo Secura.
Casi la mitad de las participantes ya había tenido unembarazo no planificado, el 18 por ciento se había realizado porlo menos un aborto y casi tres cuartos habían tenido relacionessexuales en los 30 días previos al inicio del estudio. Sólo el 3por ciento no tenía experiencia sexual.
Al comparar a la cohorte con toda la población femenina delpaís de entre 15 y 19 años, con o sin experiencia sexual, elequipo observó que el programa había logrado reducir un 41 porciento la tasa de embarazo, un 44 por ciento los partos y un 34por ciento los abortos.
FUENTE: The New England Journal of Medicine, online 1 de octubredel 2014.