
McDonald's es consciente de los cambios en los hábitos de los consumidores, cada vez más preocupados por su salud, y puede que en el futuro sea más una cafetería que una hamburguesería. Al menos ésa es lo que sostiene Dan Moskovitz, del blog The Motley Fool, que recoge Business Insider.
Este cambio no significa que McDonald's vaya a dejar de vender hamburguesas y patatas fritas, al menos a corto plazo. Simplemente implica que el principal motor de crecimiento ya no van a ser esos productos clásicos. Los últimos movimientos de la empresa apuntan a otros caminos para seguir con su expansión.
Mejorar sus ingresos con los desayunos
Y aquí es donde cobran relevancia el café y los desayunos. McDonald's está probando nuevos productos para añadir a su menú de desayunos en EEUU, productos que de triunfar podrían suponer un nuevo e importante catalizador de ingresos para la empresa.
Uno de los nuevos productos que está probando la compañía son los pastelitos, que si se piden con café bajan de precio. Algo parecido a los Mcmenús, pero en el desayuno. De momento, las reacciones de los consumidores son positivas, así que parece un paso claro en la dirección de futuro de McDonald's.
La mayor cadena de restaurantes del mundo necesita un impulso, ya que sus ventas están estancadas, especialmente en EEUU y Europa. Y ya ha dado varias pistas de que la manera de seguir creciendo no está en otro lugar sino en los desayunos, un apartado en el que ya lidera en EEUU pero en el que necesita innovar para aumentar sus ingresos.
De esta forma, con este nuevo foco en el desayuno, también cambiarán sus rivales: su 'archienemigo' ya no será Burger King; serán Starbucks (quien también está centrándose en los desayunos para impulsar su crecimiento) y Dunkin' Donuts.