
Zinkia, la empresa creadora de Pocoyó, no pasa por su mejor momento. El principal accionista de Zinkia Entertainment, Jomaca 98, propiedad del presidente de la productora, José María Castillejo, fue declarada hace poco en concurso voluntario de acreedores, y hace apenas unos días la productora de Pocoyó se vio obligada a reconocer fuertes desviaciones en sus cuentas de 2013.
Hoy, Castillejo ha remitido un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la que intenta aclarar cuál es la verdadera situación de la compañía y concluye su escrito confiando en la ayuda de Dios para poder sacar adelante su negocio.
"Confiamos en la Justicia, confiamos en las instituciones, en los organismos reguladores y sobre todo confiamos en poder seguir desarrollando nuestro negocio con la ayuda de Dios y de todos y cada uno de los profesionales que integran Zinkia y sus asociados", reza el hecho relevante.
El presidente de Zinkia también ha acusado al segundo accionista de la firma, el empresario mexicano Miguel Valladares, de aprovecharse de la debilidad de la productora para lograr su objetivo de hacerse "como sea" con el control de la firma.
"Parece evidente que son más bien intereses personales lo que le lleva a intentar por todos los medios desestabilizar el el futuro de Zinkia y muy probablemente esos intereses no sean los del resto de accionistas", ha señalado Castillejo en una información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, Castillejo, socio fundador de la productora de Pocoyó, controla a través de la sociedad Jomaca 98 el 64,7% del capital social de la compañía. Por su parte, Valladares, con una participación del 11,2%, podría arrebatar el mando a Castillejo y convertirse en primer accionista si ejecuta un crédito que adquirió a Bankia que tenía, entre otras garantías, el 33% de la participación de Castillejo en Zinkia, con lo que alcanzaría más del 40% de la compañía.