
La carrera para obtener el mayor volumen posible de shale gas y shale oil en EEUU está creando otro boom inesperado, el de la arena. ¿Por qué? Por que es ingrediente clave en la técnica de fractura hidráulica fracking para extraer estas fuentes de energía de los yacimientos.
Según recoge hoy el diario estadounidense The Wall Street Journal, se prevé que las empresas de energía emplearán 25.000 millones de kilos de arena este año, como herramienta fundamental para romper las rocas y hacer que el petróleo y gas de esquisto fluyan hacia el exterior.
En concreto, según la consultora PacWest, el uso de arena blanca -la ideal para este proceso de extracción de combustible- ha aumentado un 25% desde el año 2011 y se espera que aumente otro 20% más en los próximos 2 años.
Como ejemplo vale fijarse en Wisconsin, EEUU, donde se encuentran uno de los yacimientos de arena óptima para este tipo de procedimientos, se ha pasado de 5 a 100 minas de arena de este tipo desde el año 2010 para facilitar el proceso de fracking.
El procedimiento en concreto consiste en una mezcla de arena, productos químicos y agua de pozo a alta presión que permite romper formaciones densas de roca de modo que tanto el petróleo como el gas pueden fluir a la superficie. Una vez empleada la arena ésta no puede reutilizarse, lo que ha elevado tanto la demanda, ya que se necesitan unos 25 vagones de tren llenos de arena por cada proceso para abrir un pozo.