El presidente de la petrolera puede forzar una votación para su ratificación el próximo 27 de noviembre.
El presidente de YPF, Miguel Galucció, no tiene un amigo, tiene un tesoro con el director general de Pemex, Emilio Lozoya. Ambos han rescatado la operación contra el presidente de Repsol, Antonio Brufau, que hace ya dos años encabezó el por entonces vicepresidente de la petrolera y presidente de Sacyr, Luis del Rivero.
La intención, tal y como han expresado, es lograr que la empresa mexicana pueda participar en el yacimiento de Vaca Muerta sin la delicada oposición judicial de Repsol, empresa en la que todavía mantienen un 9,4 por ciento y una alianza -aunque improductiva- industrial y societaria.
Lozoya mantiene derechos políticos por el 9,4 por ciento de Repsol, pero lo cierto es que muchas de estas acciones se controlan a través de instrumentos derivados, lo que facilitaría la desinversión en caso de no alcanzar un acuerdo con la española, al que ha instado el Gobierno español de manera inequívoca en diversas declaraciones.
Pemex mantiene un 5 por ciento de estos títulos de Repsol a un precio que ronda los 9 euros por título y compró el restante 4,4 por ciento sobre los 19,5 euros. Aunque ya ha percibido importantes dividendos por su participación, los títulos de la petrolera cotizaban ayer a 18,59 euros por acción. Un hecho llamativo, puesto que Repsol ha recuperado gran parte del valor pese a la expropiación de YPF, que suponía el 40 por ciento de sus reservas.
El director general de Pemex, Emilio Lozoya, arremetió el pasado 5 de noviembre contra la gestión de Repsol y reiteró su ataque el pasado 20 de noviembre ya directamente al presidente de la petrolera, al que acusó de tener un sueldo muy elevado.
A estas críticas se suma el ataque perpetrado por el Gobierno argentino. El nuevo ministro de Economía, Axel Kicillof, tomó posesión y apenas unos días después la Comisión Nacional de Valores -dependiente de su departamento- decidió abrir un expediente a los dos representantes de Repsol en el consejo de YPF.
El presidente de la petrolera argentina, Miguel Galuccio, está tratando de expulsar a los dos consejeros. Para ello, el primer ejecutivo de la empresaa presentó, tal y como adelantó elEconomista.es, una reclamación ante la Comision de Valores en la que les acusa de mantener un conflicto de interés a Luis García del Río y Carlos María Tombeur, por reclamar los detalles del contrato entre YPF y Chevron para explotar Vaca Muerta.
En la apertura de este expediente, necesario para poder expulsarles, la compañía asegura que presentó los detalles en una reunión celebrada el 16 de julio, con el vicepresidente de estrategia, Fernando Gilberti. Unos días después, concretamente, el 24 de julio el consejero reclamó al presidente los detalles de dicho contrato, pero le fueron denegados.
La petrolera argentina se queja en su reclamación de la gran cantidad de denuncias que la española le ha interpuesto ante diversos órganos judiciales de EEUU, España y la propia Argentina para reclamar el pago correspondiente por la confiscación de su filial.
El presidente de YPF, en un encuentro en Buenos Aires con la prensa española, aseguró que no tenía intención de expulsar a los consejeros y que además legalmente no podía y se quejó de la deslealtad de la petrolera española. Por eso, el asunto ha llegado hasta la CNV, pero sin pasar previamente por la Comisión de auditoría de la petrolera, un hecho que desde fuentes jurídicas españolas se considera una posible irregularidad.
El reglamento de la CNV asegura que los directores a los que se aplica esta instrucción de sumario disponen de 10 días hábiles para aportar sus defensas y pruebas.
Las posibles sanciones, al término de la instrucción del sumario, son decididas por el directorio de la CNV, y podrían ir desde el apercibimiento hasta la inhabilitación por cinco años para ejercer funciones como consejeros o administradores. La resolución definitiva podría apelarse, pero serviría de una forma evidente para apartar a estos miembros del consejo.
La CNV tiene abierta además otras investigación al consejo de YPF en la etapa de presidente de Brufau, pero todavía no se ha pronunciado.
Entretanto, fuentes consultadas por elEconomista aseguran que Pemex está preparando un planteamiento global sobre la gestión de la compañía para el consejo del próximo 27 de noviembre. Por el momento, la mexicana ha elaborado ya un power point que ha presentado en la Comisión de Energía mexicana y al propio ministro de Industria, José Manuel Soria, con las críticas que tiene a la gestión de la petrolera, pero dicho documento no ha trascendido.
Del mismo modo, el presidente de Repsol prepara también sus armas para la batalla con la intención de forzar incluso una votación para ratificarse en el cargo.
Brufau cuenta con apoyos suficientes en el consejo. El presidente de Sacyr, Manuel Manrique, ha pasado esta semana en Colombia trabajando intensamente en la búsqueda de nuevos contratos para la compañía, pero la intención de la constructora es apoyar al poder establecido, es decir, hacer lo mejor para la petrolera y no desestabilizarla.
La Caixa, que como siempre ha mantenido silencio, tendría difícil explicar un voto contrario a la gestión, ya que la sintonía ha mejorado en los últimos meses y las decisiones adoptadas siempre han contado con su respaldo.
El fondo de Singapur, Temasek, es además otro de los principales aliados de Brufau. La gestión de la compañía les convenció para reforzarse en la petrolera española y siempre se han mostrado dispuestos a incrementar su participación. De hecho, también fueron los candidatos a la compra de la participación en Gas Natural Fenosa, pero la idea de tener que pagar una prima les alejó del proceso.
El Gobierno ha dado también señales claras de no querer problemas en este asunto. Tanto el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como el ministro de Industria, José Manuel Soria, han instado al diálogo entre las partes y Rajoy fue incluso más allá, al mostrarse tranquilo.
Dos años después de los movimientos realizados por el expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, para tratar de hacerse con el sillón de Repsol, la operación vuelve a repetirse. Los actores son los mismos: Credit Agricole y Cuatrecasas.
Repsol ofreció un acuerdo de colaboración tecnológica a Pemex, pero desde las declaraciones críticas lanzadas por su director general, Emilio Lozoya, la tensión entre las partes ha vuelto a ser máxima y la comunicación se ha visto notablemente afectada. No obstante, en el consejo del próximo 27 de noviembre la petrolera no tiene previsto expulsar al representante de Pemex, pero no se descarta que este hecho pueda producirse en el futuro.
Oferta de acuerdo a YPF
El ministro de Industria, José Manuel Soria, llevó una propuesta de negociación de Repsol en su reciente visita a México, cuyos detalles no han trascendido pero que, según fuentes consultadas, pasaría por incluir a varios valoradores independientes para recibir como pago efectivo y activos líquidos, ya que Brufau considera que los accionistas no verían con buenos ojos seguir invirtiendo en Argentina.
México además juega con la situación de algunas empresas españolas. Pemex decidirá la adjudicación de los floteles el 30 de diciembre. Si piden una junta, las fechas pueden coincidir.