Los presidentes de los grandes bancos españoles mantendrán la candidatura del exdirector de regulación del Banco de España José María Roldán para presidir la Asociación Española de la Banca (AEB), si bien previsiblemente no cerrarán la puerta a nuevos nombres que puedan surgir en la carrera por suceder a Miguel Martín, según han afirmado a Ep fuentes financieras.
El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, el del BBVA, Francisco González, el del Popular, Ángel Ron, el del Sabadell, Josep Oliú, y el de Bankinter, Pedro Guerrero, se darán cita esta semana en la sede de la patronal bancaria para consensuar la postura de la banca ante la polémica surgida con el ministro de Economía, Luis de Guindos.
"Vamos a poner el contador a cero, se vuelve al punto de partida", han afirmado las fuentes consultadas, que precisan que este hecho no implicaría la retira de la candidatura de Roldán. En este sentido, emplazan a la asamblea general que la patronal celebrará el próximo 3 de abril: "Queda mucho tiempo todavía y pueden surgir nuevos candidatos".
Desde el sector se enfatiza que la gran banca no ha renunciado a Roldán como presidente de la AEB para los próximos cuatro años, pero se aclara que el anuncio por parte de la patronal de la candidatura del exdirectivo del Banco de España no presupone su elección definitiva. "Hasta el momento en el que se celebre la asamblea, caben más posibilidades", explican las fuentes.
Los pesos pesados del sector financiero apuestan, tras la tormenta desatada, dejar "las aguas tranquilas". Eso sí, sin renunciar a Roldán como candidato, ya que la actitud del ministro de Economía se considera "una injerencia" en un sector privado.
Las fuentes recuerdan que, tras el veto formulado por Guindos a José Manuel Campa como candidato por haber pertenecido a un Gobierno socialista, la candidatura de Roldán surgió con naturalidad al poner en valía la trayectoria profesional del exdirector de regulación del supervisor. "Nadie propuso a Roldán con rotundidad", aseguran.
El cambio anunciado por Guindos en el régimen de incompatibilidades del Banco de España, que pasaría de seis meses a dos años, no sería retroactivo, aunque desde el sector se interpreta este movimiento del ministro como un intento de presionar a Roldán y a la AEB para renunciar a su candidatura para sustituir a Miguel Martín.