
BBVA obtuvo un beneficio neto de 1.734 millones de euros hasta marzo, que representó un incremento del 72,6% con respecto al mismo mes de 2012, gracias al tirón de los mercados emergentes y a las plusvalías obtenidas de la venta de activos no estratégicos, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). BBVA pide medidas de estímulo para favorecer la creación de empleo.
El resultado es mejor de lo que que esperaba el mercado. De media, los analistas habían previsto que obtuviera un beneficio trimestral de 1.388 millones de euros.
Desde el punto de vista de los ingresos, la entidad obtiene un margen bruto durante el primer trimestre de 2013 de 5.471 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 3,9%.
En su nota al regulador, el banco estaca el comportamiento de su margen de intereses, que pese al "entorno en el que se genera, de bajos tipos de interés y de encarecimiento de la financiación del balance euro", se ha incrementado un 0,8% interanual, 3.623 millones de euros.
En cuanto a las comisiones, aportan 1.052 millones de euros a la cuenta de resultados del grupo, cantidad similar a la del mismo período del ejercicio anterior.
Las pérdidas por deterioro de activos financieros acumuladas ascienden un 26,7% en el último año hasta los 1.376 millones de euros. Este comportamiento se explica por el aumento de los saneamientos en España, en línea con las previsiones, debido fundamentalmente al deterioro de la cartera de empresas.
En cuanto a las provisiones, ascendieron a 167 millones y su principal componente se debe a costes por prejubilaciones y, en menor medida, a dotaciones por riesgos de firma y a aportaciones a fondos de pensiones y otros compromisos con la plantilla.
La tasa de morosidad se situó en un 5,3% hasta marzo, con una cobertura del 71%, frente al 5,1% al cierre del ejercicio 2012 y al 4% del primer trimestre del año pasado.
La cartera de crédito a la clientela aumentó el 4% interanual, hasta los 373 millones de euros, "por el impacto positivo de los tipos de cambio" y gracias al "incremento de la actividad en los países emergentes". Por su parte, los depósitos crecieron el hasta los 304 millones, desde los 278 del primer trimestre de 2012.
Por áreas de negocio, España registra un beneficio de 569 millones de euros, la actividad inmobiliaria en España una pérdida de 346 millones, Eurasia contribuye con 179 millones, México con 435 millones, América del Sur con 348 millones y Estados Unidos con 95 millones.