Ibercaja cerró 2012 con pérdidas de 485 millones de euros debido a las fuertes provisiones de 1.433 millones de euros realizadas en el conjunto del ejercicio, superiores en 6,8 veces al total provisionado en 2011, informó la entidad, que se ha consolidado entre el grupo de entidades bancarias más sanas del país y sin haber recibido ayudas públicas.
Ibercaja ha acreditado la fortaleza de sus ingresos recurrentes, que sumados a los ingresos extraordinarios destinados a cubrir las necesidades de capital dictaminadas por Oliver Wyman le han permitido obtener unos resultados antes de saneamientos de 748 millones, un 163% más que en 2011.
Todo ello en un ejercicio caracterizado por la recesión económica, el descenso de la actividad y los profundos cambios regulatorios, informó la entidad en un comunicado.