
La alta velocidad brasileña sigue creando incertidumbre a los candidatos hasta el último momento. Si el proyecto ya ha sufrido varios retrasos históricos en su puesta en marcha, la Agencia Nacional de Transportes Terrestres carioca le vuelve a dar emoción a una licitación a la que ya han confirmado que se quieren presentar dos consorcios españoles: uno liderado por Renfe, Talgo e Ineco y otro en el que participará CAF.
Si los candidatos pensaban tener listo el pliego de condiciones para finales del pasado mes de octubre, las autoridades brasileñas han decidido prorrogarlo un mes más ante el "volumen de contribuciones recibidas" por las empresas interesadas en el contrato. En concreto, la nueva fecha para dar a conocer las condiciones del ambicioso concurso es el 26 de noviembre, según recoge un comunicado oficial publicado por la propia Agencia Nacional de Transportes Terrestres.
En el último Salón Ferroviario de Berlín, Innotrans 2012, tanto responsables de Talgo como de CAF confirmaron a este periódico que se habían reunido con las autoridades de Brasil para darles a conocer sus proyectos. En principio, la intención de la empresa presidida por Carlos de Oriol es participar con el Avril, su nuevo tren de alta velocidad que todavía no ha entrado en servicio y que fue presentado oficialmente en Berlín. Para CAF el concurso sería una oportunidad única para lanzar el Oaris, su nuevo proyecto de AVE.
Además de las propuestas españolas, ya existen varios fabricantes ferroviarios que se han interesado por el proyecto. Así, el grupo francés Alstom participaría junto con el operador público galo SNCF. También podrían estar presentes consorcios japoneses.
Sobre el papel, este nuevo retraso de un mes podría posponer el último calendario anunciado, en el que el 30 de abril de 2013 era la fecha límite para que los consorcios interesados presentaran su oferta. Las previsiones iniciales del Gobierno brasileño eran que para el tercer trimestre del ejercicio se conociera al ganador definitivo.
A diferencia del contrato del AVE a La Meca, que fue ganado por un consorcio español liderado por Talgo y Renfe, esta licitación muestra bastantes diferencias, ya que se necesitará un socio local brasileño con bastante peso en el consorcio para presentarse al concurso.
Los candidatos competirán por un contrato de 3.500 millones de euros, que unirá 412 kilómetros a través de alta velocidad ferroviaria con trenes de última generación con capacidad técnica para poder alcanzar los 350 kilómetros por hora en servicio comercial.