Los títulos que ACS traspasó hace una semana se han seguido moviendo, lo que en definitiva supone rebajar su presencia y poder en el accionariado de la eléctrica. Tras cerrar una operación muy confusa la pasada semana con Société Générale para cederle el 8,2% de su participación, ahora el banco francés ha vendido en torno a un 5% de este paquete.
Sin embargo, tanto desde la constructora como desde la entidad no se han comunicado con claridad los términos del acuerdo, de tal forma que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) les ha instado durante toda la semana a aportar información más concreta sobre la operación.
El resultado ha sido un total de cinco hechos relevantes, tres de ellos justo al límite de cumplir el plazo máximo para aportar información tras cerrar una operación. Société declaró ayer que el pasado viernes vendió un 1,68% de Iberdrola a otra entidad, sin precisar cuál es la misma. Además, se ha deshecho de otro 3,18% a través de operaciones de préstamo de valores, donde tampoco se ha especificado las entidades. Por último, un 0,36% ha sido vendido en el mercado. El banco comunicó ayer que actualmente cuenta con una participación del 3,26%.
Al margen de esta operación, en los registros de la CNMV aparece cómo en los últimos días la constructora ha vendido un 0,2% de su participación directa, lo que a precios de mercado supone que ha ingresado unos 37,3 millones de euros. El presidente de ACS (ACS.MC), Florentino Pérez, se podría haber visto en la necesidad de vender este pequeño paquete accionarial para abarcar los costes financieros de la operación cerrada con Société.
Con todo, ahora mismo la constructora ha declarado que cuenta con un 6,60% en Iberdrola (IBE.MC), sumando la directa y la indirecta. De esta cantidad, hay que recordar que un 5,4 es la cantidad que tiene a través de derivados con Natixis, por el que tiene garantizado los derechos de voto de estos títulos.
En los registros ACS sigue mostrando la participación del 8,2% vendida a Société pero bajo el epígrafe de instrumento financiero. Este acuerdo contempla un plazo de tres años, liquidable en acciones o dinero, a opción de la constructora, garantizado con un préstamo de valores sobre acciones de Iberdrola. La constructora cerró esta operación para refinanciar 1.600 millones y estar exento de aportar garantías por la caída de las acciones.
ACS cobra el dividendo
Por otro lado, Iberdrola ampliará capital en un 2,78% y repartirá 397 millones de euros brutos como parte de su programa de dividendo flexible, en el que ofrece a los accionistas la posibilidad de recibir la retribución en acciones o en efectivo. ACS, al igual que en otras ocasiones, ha cobrado el dividendo en efectivo, mientras que un 58,38% del capital ha optado por recibir acciones.
Entidades
ACS declara un 6.6% en Iberdrola
