El banco francés Crédit Agricole obtuvo un beneficio neto atribuido de 252 millones de euros en los tres primeros meses del año, lo que representa una caída del 74,8% respecto al mismo periodo de 2011, según informó la entidad, que dijo estar preparada para hacer frente a cualquiera que sea la evolución de los acontecimientos políticos en Grecia.
Los analistas consultados por Bloomberg esperaban de media una ganancia trimestral de 482 millones de euros.
La cifra de negocio de la tercera mayor entidad de Francia ascendió a 5.425 millones de euros, un 2,3% menos, mientras que duplicó la partida destinada a provisionar el riesgo de crédito, hasta 1.770 millones, como consecuencia del impacto negativo de 397 millones por la participación del banco en el plan de reestructuración de la deuda griega, así como de otros 485 millones relacionados con su filial helena, Emporiki.
Por otro lado, Crédit Agricole informó de que a finales de marzo había alcanzado ya el 64% del objetivo de reducción de sus objetivos de financiación, mientras que ya había cubierto el 91% del plan de reducción de activos de riesgo.