
Marina d'Or empieza a ver la luz al final del túnel. Tras varios años muy complicados, en números rojos y con una deuda que en 2009 alcanzaba casi los 700 millones de euros, la empresa vuelve a respirar. Y todo apunta a que Marina d'Or pueda volver a ser la ciudad de vacaciones que un día revolucionó el sector turístico español y enamoró a los extranjeros. Su presidente, Jesús Ger, ha hecho los deberes.
En ese sentido, el grupo encara este año el inicio de las obras de la urbanización de su gran proyecto en Oropesa (Castellón): Marina d'Or Golf. Se trata de la construcción de un gran complejo turístico sobre una superficie total de 18 millones de metros cuadrados, aunque sólo se construirá sobre la mitad, que integra tres campos de golf, siete hoteles temáticos de diferentes categorías -incluyen una recreación de los canales de Venecia y una pista de esquí entre otros atractivos- y alrededor de 36.000 viviendas.
Viviendas de protección oficial
En la primera fase, explican prudentes desde la empresa, se construirán los campos de golf y dos de los hoteles. En cuanto a la vivienda, se han planificado de momento 3.000, que serán construidas tanto por Ger como por otras propietarios de terrenos. El 20% de las viviendas a construir serán de protección oficial (VPO), según indicaron desde la Conselleria de Medio Ambiente.
La duración prevista para las obras de urbanización es de 8 años. No obstante, teniendo en cuenta que el proyecto contempla varias fases y que además de los edificios habrá que soterrar líneas eléctricas y obtener los permisos y construir plantas depuradoras de aguas y subestaciones de energía, es probable que no está finalizado completamente hasta dentro de 20 o 25 años.
La compañía confía ahora en poder iniciar los trabajos en 2012 e incluso Deloitte, la firma que se ha encargado de supervisar sus cuentas, reconoce que la homologación y aprobación de los planes parciales por parte de la Generalitat Valenciana "afectará previsiblemente a los niveles de actividad y generación de resultados".
Inicio de los trabajos
Pero lo más importante, según los auditores, es que en este contexto, "el grupo ha llevado a cabo en los últimos años un proceso de refinanciación de la deuda bancaria, al objeto de adecuar su estructura financiera a la situación actual y a las necesidades futuras".
Aunque los datos del pasado ejercicio no están todavía cerrados a falta de la correspondiente auditoría, los resultados de 2010 invitan al optimismo. La compañía no sólo está consiguiendo refinanciar su deuda, sino que ha reequilibrado también su situación patrimonial y, sobre todo, ha vuelto a ganar dinero. Si en 2009 tuvo unas pérdidas después de impuestos de 26,4 millones, el ejercicio siguiente lo cerró con unos beneficios de 4,6 millones de euros. Y eso que la facturación se ha reducido un 30 por ciento, hasta los 112 millones.
De hecho, dado los bajos niveles de actividad, para lograr la salida de números rojos ha sido fundamental acometer un severo plan de ajuste de plantilla, que se ha reducido prácticamente a la mitad, desde 1.540 hasta 865 trabajadores.
Con estos números, ahora todos los ojos están puestos en el proceso de reparcelación de lo que será el mayor programa urbanístico de la Comunitat Valenciana.
En este momento está en fase de finalización el documento refundido que recoge todas las modificaciones introducidas en el Proyecto a consecuencia de los informes sectoriales, la declaración de impacto ambiental y la aprobación de la Conselleria. No obstante, desde la compañía se señala que, "cuando se llegue al punto de iniciar las obras de urbanización y de construcción, sí que resultarán muy relevantes los indicadores económicos, la capacidad de los agentes financieros y el estado del mercado turístico. Pero por el momento hay que ir cubriendo etapas y avanzando en los trámites".
La inversión en hoteles ha sido, desde el origen, una apuesta y un compromiso de Marina d'Or. En su opinión, el desarrollo del terciario de Marina d'Or Golf es necesario y simultáneo al resto del proyecto, por lo que su ejecución, con independencia de alianzas o participación de inversores, será simultánea a la urbanización. En cuanto a los campos de golf, dos de ellos firmados por Greg Norman y otro por el español Sergio García, están diseñados para acoger torneos de alta competición y uno de ellos incorporará una escuela de golf. Además, se ha puesto especial empeño en que sean de dificultad variable.
Mundo Ilusión
Pero si Marina d'Or Golf será una realidad, el parque temático Mundo Ilusión, que ocupará una superficie de 800.000 metros cuadrados, tendrá que esperar, al menos de momento. El proyecto que el expresidente de la diputación Carlos Fabra presentó a finales de los años 90 sigue paralizado.
Desde Marina D'Or se insiste en que no se ha desestimado, sino que se vio suspendido hasta la resolución de los expedientes de aprobación del programa. Las pretensiones para este parque eran muy altas. De hecho, está previsto que fuera la única sede europea del Circo del Sol. El número aproximado de puestos de trabajo que generará esta idea oscilará entre los 400 y los 500 empleos.
Mientras, el proyecto de Jesús Ger toma forma y ya hay quien habla del nuevo CD musical como el que se editará para Marina d'Or. Suena la música...