
"Las cajas se están preparando para un futuro incierto. Por ello, quieren tener como directivos a los mejores gestores y eso es bueno", explica a elEconomista Ángel Campabadal, secretario sectorial de Ahorro de FES-UGT. En apenas unos días cuatro entidades (Caixa Catalunya, BBK, Cajasol y Cajasur) han cambiado de director general.
Si bien hay matices, el análisis del responsable sindical es compartido por muchos dentro del sector. El propio Juan Ramón Quintás, presidente de la CECA, contextualiza estos movimientos como un hecho natural dentro del circuito de toda empresa. Quintás niega que haya una crisis en las cajas .
Pero hay que ir una por una. De entrada, varias entidades han invitado a que se marchasen directores. Y en otras, han sido ellos mismos los que se han ido.
Es el caso de José María Loza, máximo ejecutivo de Caixa Catalunya durante una década. Loza presentó su dimisión por "motivos personales". En realidad, tuvo importantes desavenencias con el presidente Narcís Serra. Los roces entre el ex vicepresidente del Gobierno, llegado a la caja hace tres años y un hombre con más de tres décadas en la caja, eran constantes por el reparto de poderes. Le releva Adolf Todo, que hasta ahora era el máximo ejecutivo de Caixa Manresa.
Movimientos en las andaluzas
Más evidente fue la salida del director de Cajasol, Jose María Ramírez Lomas, y su sustitución por Rafael López-Tarruellas. Ciertos retrasos y problemas de integración tecnológica y operativa en la fusión de San Fernando y el Monte llevaron al presidente Pulido a prescindir de su número dos. Precisamente el presidente de la entidad sevillana ha recurrido a López-Tarruella porque es un experto en fusiones. No en vano, participó activamente en la unión de las cajas rurales de Huelva y Sevilla que dio a luz a Caja Rural del Sur.
En Córdoba, el presidente de Cajasur, Santiago Gómez Sierra acaba de nombrar director general a Alfonso Tolcheff, ex consejero delegado del Urquijo. La caja controlada por la Iglesia quiere dejar atrás una época marcada por las polémicas, que incluyó una auditoría y avisos del Banco de España por sus riesgos, especialmente los inmobiliarios.
Hace unos meses ya cambió a su cúpula. Tolcheff fue durante 11 años consejero delegado del Banco Urquijo hasta que hace dos años el Banco Sabadell decidió adquirirlo. La entidad cordobesa subraya su larga experiencia en banca comercial. Con esta decisión, la entidad quiere poner punto y final a una época en la que ha tenido tres directores generales en menos de un año (José Ruiz y José Antonio Arcenegui).
Sánchez-Asiaín, a la BBK
Por su parte, la BBK ha creado una dirección general -con grado de consejero delegado- para incorporar al ex del BBVA José Ignacio Sánchez-Asiaín. Aquí no ha habido sustitución, ya que se ha fijado un nuevo puesto. Desde algunos círculos se interpreta como "una apuesta por liderar la futura fusión vasca, a través de un director joven, de familia de banqueros", auguran.
Otros cambios recientes han sido el de Miguel Ángel Barra en Caja de Extremadura, que cogió el testigo de José María Portillo tras dimitir a los pocos años de su nombramiento como número dos.
En Bancaja, Aurelio Martínez accedió hace pocos meses a la dirección después de la marcha forzada de Fernando García Checa, tras chocar con el presidente José Luis Olivas. Las tensiones con el máximo responsable eran evidentes en algunos puntos, sobre todo en las decisiones más políticas.