
Una vez más, el banco de inversión más grande de EEUU se ha mostrado inmune a la epidemia desatada por las hipotecas de alto riesgo y ha sorprendido con unos resultados que han superado todas las expectativas del mercado. Goldman Sachs ha cerrado su año fiscal con un beneficio neto récord de 11.599 millones de dólares, un 22 por ciento más que en 2006.
Mientras otras entidades similares como Merrill Lynch o Bear Stearns se desangran por las pérdidas derivadas por sus inversiones en fondos respaldados por hipotecas basura, Goldman ha elevado su facturación neta un 22 por ciento, hasta alcanzar los 45.987 millones de dólares. Y su cifra de negocio ha crecido un 27 por ciento hasta los 87.968 millones de dólares.
Curiosamente, el banco de inversión ha conseguido más de la mitad de sus ingresos brutos gracias a sus operaciones fuera de EEUU, aunque tanto en el continente americano, como en Asia o Europa, Goldman ha batido récords.
La compañía especificó que su división de banca de inversión ingresó alrededor de 7.555 millones de dólares , cerca de un 34 por ciento más que el año pasado. Por otro lado, sus operaciones de renta fija, divisas y valores facturaron un 13 por ciento más, hasta llegar a los 16.165 millones de dólares, mientras que la de valores registró una cifra de negocio de 11.304 millones de dólares.
Lloyd Blankfein, consejero delegado, se mostró muy satisfecho con los resultados y aseguró que, dado el contexto del mercado, son "aún más conscientes de la importancia de una gestión de riesgo efectiva".
Con un aumento del 2 por ciento en sus beneficios para el cuarto trimestre, Goldman Sachs está de enhorabuena. Durante los tres últimos meses de su año fiscal, el banco obtuvo un beneficio neto de 3.215 millones de dólares, mientras que su facturación neta alcanzó los 10.741 millones de dólares. Sin embargo, su director financiero, David Viniar, aseguró durante la presentación de resultados que, pese a que éstos han superado fácilmente las previsiones de los analistas, deben "ser cautos sobre el futuro a corto plazo".
Mientras en Goldman se despiden del año con una enorme sonrisa en la cara, en Morgan Stanley o Bear Stearns se preparan para hacer públicos sus resultados. Los de Morgan Stanley se darán a conocer hoy mismo. Los de Bear Stearns, uno de los más perjudicados por las hipotecas subprime, serán publicados mañana jueves.