Bankia y Banca Cívica se enfrentan a una semana clave para cumplir con los objetivos de salida a bolsa a mediados de julio.
En los próximos días, las direcciones de ambas entidades decidirán si finalmente continúan con la operación de colocación de acciones ante la incertidumbre desatada en los mercados por la situación de Grecia.
Ambos grupos tienen listo el folleto, por lo que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) podría autorizar sus proyectos. El regulador, siempre y cuando las entidades sigan adelante con los planes, podría dar el visto bueno a Bankia en la jornada de hoy o el jueves, mientras que a Banca Cívica se le espera para el jueves.
Si esta semana o principios de la siguiente las circunstancias desaconsejan las salidas a bolsa, las operaciones se retrasarían hasta después de verano por cuestiones de calendario, ya que los estrenos se tendrían que fijar en los últimos días de julio, previos a las vacaciones de agosto.
Bankia pretende captar entre 3.000 y 4.000 millones, mientras que Banca Cívica quiere cerca de 1.000 millones. Ésta selló ayer un acuerdo con Banca Madrid para la colocación en el tramo minorista, que se suma a La Caixa.
Trabajadores de Banca Cívica -medio centenar de empleados de Cajasol- se concentraron ayer en Sevilla para protestar por las "presiones" a las que se está sometiendo a la plantilla ante el debut bursátil. Esas presiones incluirían, según CCOO, la sugerencia a los propios empleados para que compren títulos y la preventa de títulos.
Bankia baraja salir a bolsa el 15 de julio 
