La entidad financiera estadounidense ha anunciado hoy que tuvo unas pérdidas de 1.200 millones de dólares en el cuarto trimestre, castigada por un impacto de 2.000 millones en provisiones voluntarias en su negocio de préstamos y seguros para el hogar.
Descontando esta carga, las ganancias habrían ascendido a 756 millones de dólares, 0,04 dólares por acción, por debajo de lo esperado por los analistas, que eran 0,21.
Además, el pago de dividendos a las acciones preferentes aumentó un 541%, hasta los 1.244 millones de dólares.
En cuanto a la la cifra de negocio, Bank of America facturó entre octubre y diciembre 22.398 millones de dólares, lo que supone un 10,6% menos que los 25.076 millones de dólares del año anterior.
En el conjunto del ejercicio, las pérdidas del banco ascendieron a 2.200 millones de dólares, con unas provisiones de 12.400 millones de dólares. Sin ellas, el beneficio habría sido de 10.200 millones de dólares.
Año de reparación
El presidente y consejero delegado de Bank of America, Brian Moynihan, destacó que 2010 ha sido el año de la "necesaria reparación y reconstrucción".
"Entramos en 2011 con la mejor franquicia de atención al consumidor del negocio en un entorno de mejora de la economía. Devolveremos valor a nuestros accionistas centrándonos en los consumidores y los clientes, continuando con la creación de capital y ejecutando nuestra estrategia", añadió.
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