
El secretario estadounidense del Tesoro, Timothy Geithner, prometió este jueves que el gobierno no salvará nunca más a los bancos que hayan tomado demasiados riesgos con el dinero de los contribuyentes, y que éstos serán "desmantelados".
Geithner hizo esas declaraciones en una entrevista que ofreció a la cadena de televisión ABC.
"En el futuro, si ellos siembran nuevamente el desorden y se encuentran una vez más al borde del precipicio, queremos estar bien seguros de poder cerrarlos, de desmantelarlos con toda seguridad, sin que el contribuyente tenga una vez más que salvarlos", dijo Geithner en una larga exhortación a favor de la reforma del sistema financiero que se discute en el Congreso.
El proyecto de ley, presentado por la mayoría demócrata, debe limitar el tamaño de los bancos y los riesgos que pueden tomar, destacó Geithner tras afirmar su confianza en que la reforma será aprobada.
De hecho, los republicanos que la bloqueaban se muestran más conciliadores tras las acusaciones de fraude presentadas contra Goldman Sachs por el regulador financiero, la SEC, un hecho que despertó la ira popular.
El mismo mensaje será repetido este jueves por el presidente Barack Obama, quien se encuentra no lejos de Wall Street para presentar los puntos fuertes de la reforma.
Ella debería evitar que el sistema financiero se encuentre al borde de la catástrofe, como sucedió en el otoño boreal de 2008, reforzando especialmente los controles sobre los instrumentos financieros que condujeron a las pérdidas en Wall Street, y sobre la forma en la cual operan las instituciones financieras.
"Es importante que la gente comprenda que no se puede funcionar con un sistema donde los inversores privados o los responsables de las empresas tomen riesgos y se digan que de cualquier forma el gobierno les va a proteger", advirtió el secretario del Tesoro.