
El grupo Marsans tiene sobre la mesa ofertas en firme por su compañía aérea Air Comet, por buena parte de sus concesiones de explotación de líneas de autobuses y por su agencia de viajes, tres negocios que le ayudarían a sanear su delicada situación financiera si se desprende de ellos.
Según ha podido saber este periódico de fuentes conocedoras de los detalles de la negociación, la compañía propiedad de Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual está analizando todas las propuestas, aunque todavía no han tomado una decisión definitiva en el caso de la aerolínea y los autobuses. En el negocio de los viajes, habría comenzado ya el proceso de due dilligence (valoración de activos), según añaden las mismas fuentes.
Los viajes valen 450 millones
Desde antes del verano se había rumoreado la venta de Viajes Marsans a Orizonia, pero la matriz de Viajes Iberia no estaba dispuesta a pagar los 450 millones de euros en los que, como mínimo, valora el grupo a su negocio de agencias, según explicó la compañía a elEconomista. Las posiciones, insalvables en un primer momento, se habrían acercado en los últimos meses.
Aunque su valoración es menor a la de las agencias de viaje, tanto Air Comet como las concesiones de autobuses son muy atractivas. En el caso de la aerolínea presidida por Gerardo Díaz Ferrán y dirigida por Ignacio Pascual (hijo de Gonzalo), su flota es bastante moderna, ya que está recibiendo nuevos Airbus A330-200, una modernización de flota que de momento se ha paralizado unos meses por la crisis y la caída de la demanda.
El pedido oficial que cerró con el fabricante aeronáutico europeo incluye 61 aviones y estaría valorado en 6.000 millones de euros. Este contrato incluye también el A380, el avión comercial más grande del mundo, con capacidad para 555 pasajeros. Hasta el momento ninguna aerolínea española lo opera.
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