El presidente de Cepyme y candidato a las elecciones a la presidencia de CEOE, Antonio Garamendi, no dejará de liderar a la patronal de la pequeña y mediana empresa aunque el otro candidato conocido por el momento y actual presidente de la Confederación, logre la reelección.
"Si pierdo contra Rosell no dejaré la presidencia de Cepyme. Son temas independientes que no tienen nada que ver", ha dicho en declaraciones a Radio Intereconomía.
Garamendi ha apostado por una CEOE "mucho más participativa, de abajo a arriba", así como "mucho más transparente interna y externamente". "Tiene que ser muchísimo más independiente para expresar las opiniones que tiene la organización", ha dicho, para apostillar que "la CEOE no tiene el mismo prestigio que hace unos años".
Moderación salarial
Más allá de la Confederación, Garamendi ha apostado por seguir la senda de "moderación salarial", puesto que hasta ahora ha servido para "aumentar la competitividad de las empresas, especialmente de las industriales".
Asimismo, ha llamado a hacer una reforma fiscal "más ambiciosa" para las pymes, a reducir su carga social, normalizar el crédito, mejorar vías alternativas de financiación, reducir las cargas administrativas, rebajar la morosidad pública y privada, implementar ayudas para impulsar el equipamiento tecnológico, mejorar la cualificación profesional y promover la diversificación sectorial. "El apalancamiento que teníamos en las empresas era muy alto. Tenemos que empezar a arriesgar un poco más", ha concluido".
"Vergüenza" por los escándalos
