Las personas se comprometen con proyectos crowdfunding porque reciben una compensación a cambio, según la plataforma Lánzanos, cuyo fundador, Gregorio López Treviño, ha dicho que "la naturaleza del retorno puede atender a motivaciones diversas, no sólo materiales, y de hecho el plano emocional suele tener un peso muy importante".
La mayoría de las personas que invierten a través del crowdfunding lo hacen porque reciben una compensación y sólo un 10,2% hacen aportaciones sin esperar recompensa, según un estudio de la plataforma de crowdfunding Lánzanos a partir de una encuesta a 3.000 personas.
Sólo el 10,2% de los encuestados confirmó que su última aportación realizada era a un proyecto sin recompensa, mientras que un 33,3% contribuyó para recibir una simbólica.
Motivos
Un 61% lo hizo a cambio de recibir un producto, en tanto que sólo el 4% optó por la precompra del acceso a un evento y el 2% invirtió para participar como socio del negocio.
Sólo un 0,5% optó por el préstamo para recuperar su inversión en un futuro con un determinado interés.
No todos invierten por algo material y, en este sentido, casi un 70% de los encuestados señala que les satisface "contribuir a crear lo que les gusta".
Además, casi un 60% lo hace porque "es una vía sin intermediarios y se apoya de forma directa a los creadores y emprendedores" o porque "contribuye a crear cosas innovadoras".
Por otro lado, la investigación ha desvelado la existencia de tres perfiles de inversores en crowdfunding, entusiastas, aquellos que participan en más proyectos por "cambiar las cosas y mejorar el mundo"; fríos, aquellos que participan con la idea de que se trata de un modo de ayuda a un proyecto "y poco más", y los moderados, cuya motivación muestra un equilibrio entre las dos anteriores.
Claves para el éxito
Para que una campaña crowdfunding tenga éxito, el producto debe ser de calidad, factible, claro y transparente con el dinero que solicita y la manera de utilizarlo.
Los encuestados aseguran que también es importante que el producto o servicio se muestre de forma atractiva y que, de alguna manera, resulte innovador.
Lo que no debe tener un proyecto de estas características es que se perciba como un proyecto arriesgado con dudas sobre su viabilidad y también juega en contra que lo avalen personas famosas o grandes empresas.
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