
El crédito continúa siendo un quebradero de cabeza para pymes y autónomos, pero los indicadores muestran síntomas de una futura relajación de la asfixia crediticia. Los bancos esgrimen ya sus ofertas y planes específicos para los colectivos que forman la base del tejido empresarial español.
Los últimos datos del Banco de España mostraron una leve mejoría para las empresas de menor tamaño. Los préstamos a empresas inferiores a un millón de euros, aquellos asociados a las pymes , aumentaron el último trimestre de 2013 casi un 10%. Hoy en día asociar un producto financiero a la palabra pyme es prioritario para las entidades financieras.
Un ejemplo de esta competición por atraer a micro y pequeñas empresas es el Plan Pyme de Bankia, anunciado el pasado febrero, que destinará 1.300 millones de euros a las pequeñas empresas y 700 millones a las microempresas -como los comercios- hasta 2015. O MicroBank, banco especializado en microfinanzas de la Caixa, que ofrece soluciones a empresarios y empresas familiares; y que aumentó los microcréditos concedidos en 2013 respecto al año anterior en un 37,5%, de unos 40.800 a 55.800, alcanzando un saldo total de 313 millones de euros, según datos publicados por la entidad.
Comercio exterior y 'factoring'
La Caixa, al igual que Sabadell y BBVA, pone el foco a su vez en asesoría de comercio exterior y en soluciones de factoring -cesión de las facturas a una compañía para que se ocupe de su gestión de cobro- y confirming -gestión externa de los pagos aplazados a proveedores-.
Por su parte, ING Direct también ofrece una linea de crédito dentro de su gama de productos para negocios. El tipo de interés, de 6,5% TIN -8,94% TAE-, resulta competitivo en el contexto actual aunque todavía dista mucho de los tipos medios anteriores a la crisis económica, inferiores al 5% para importes inferiores a un millón de euros. Respecto a las lineas de crédito de entidades como el Instituto de Crédito (ICO) y el Banco Europeo de Inversión (BEI), estas han mejorado sus objetivos en comparación con 2013. El año pasado el ICO concedió el 11,4%del total de préstamos a pymes en España, tras un aumento un 21% interanual que le llevó a alcanzar los 13.900 millones de créditos concedidos.
El Instituto asegura que ya están aumentando los créditos a las pymes y que se ofrecen mejores condiciones. El objetivo este año es conceder 16.000 millones (un aumento del 15%), con un límite máximo fijado en los 22.000 millones.
En cuanto al BEI, la entidad destinó un 14,9% del total de fondos asignados a los proyectos españoles, lo que supone un incremento del 32% sobre 2012. De estos 10.656 millones de euros, un 24% (2.550 millones) llegó a los bolsillos de pymes y autónomos.
Anteproyecto de Ley
Apoyando las estrategias de las entidades financieras, el Gobierno publicó la pasada semana en la web del Tesoro Público el anteproyecto de Ley de fomento de la Financiación Empresarial, que estará en audiencia pública para su consulta hasta el 28 de marzo, y que tiene como objetivo hacer más flexible y accesible la financiación para pymes , además de fortalecer la financiación no bancaria.
En cualquier caso, a pesar de la importancia de este mercado para las entidades financieras, los créditos españoles siguen siendo de los más caros de Europa y pymes y autónomos continúan viendo en la financiación su principal obstáculo.
Según el Observatorio de Clima Emprendedor de Sage de 2013, un 40% de los encuestados optó por la autofinanciación al comenzar su negocio, y un 33% opina que la falta de financiación es su mayor dificultad empresarial.