Las negociaciones entre el Gobierno de Panamá y el consorcio que lidera Sacyr para la construcción de la tercera esclusa del Canal chocan con la intransigencia de las autoridades del proyecto, que no aceptan la última propuesta de Sacyr.
El consorcio liderado por la constructora española ofrece una alternativa coherente que pasa por financiar la mitad de los 1.200 millones de euros de sobrecostes, además de ofrecer un plan de repago de los 600 millones de euros que Panamá ya ha entregado como adelanto. Esto es un gran paso por parte de la compañía liderada por Manuel Manrique, que desde un principio ha mostrado su disposición e interés en alcanzar un acuerdo, y que espera que la otra parte estime el esfuerzo que supone para Sacyr.