La CNMV ha levantado el veto a las posiciones cortas, que mantenía desde el 23 de julio. El argumento de la prohibición fue primero la extrema volatilidad, que podría perturbar el funcionamiento del mercado, y unos meses más tarde la incertidumbre que añadiría a la reforma financiera. Las posiciones cortas no son las causantes de la volatilidad y la incertidumbre, sino un reflejo de las mismas. La mejoría que se ha experimentado en estos meses de prohibición responde a la confianza que infundieron en los mercados las palabras de Mario Draghi el pasado mes de septiembre y a los pasos que se han dado en la Eurozona para hacer realidad la unión bancaria. Bienvenida la decisión de Elvira Rodríguez de dejar funcionar libremente el mercado.