Pedro Morenés no olvida su faceta profesional en importantes empresas y está decicido a aplicar esta experiencia para sanear las cuentas de Defensa. Una vez saldados los créditos pendientes desde 2010, el ministro se ve con las manos libres para negociar mejores condiciones para las compras del departamento hasta 2025. El importe previsto para gastar en material armamentístico en los próximos 13 años asciende a más de 25.000 millones. El objetivo es bajar precios y ampliar plazos de pago. Se intentará renegociar algunos compromisos y, en todo caso, revender a terceros el material que no se estime necesario. No siempre es posible, pero merece la pena, cuando se puede, imitar la gestión empresarial en la Administraciones Públicas.
